Capítulo 6748 James entró en él, con las manos extendidas mientras dibujaba un enorme orbe de luz carmesí en el sentido contrario a las agujas del reloj, desatando una aterradora luz sagrada de diez colores. De repente, los miles de planetas que giraban rápidamente alrededor de la Formación Haurvatat fueron capturados por innumerables luces sagradas de diez colores, invirtiendo gradualmente su rotación anterior en el sentido de las agujas del reloj. Al segundo siguiente, el enorme palacio del templo Haurvatat estalló con estruendosos rugidos. El color del cielo cambió inmediatamente y la tierra tembló rápidamente, como si señalara el fin del mundo. Aquellos dentro del Templo Haurvatat entraron en pánico y se apresuraron a ejercer sus poderes en defensa en medio del suelo tembloroso y las montañas temblorosas. A pesar de sus esfuerzos, todavía fueron sacudidos por las aterradoras consecuencias, sufrieron heridas graves y tosieron sangre. Sobre el vasto palacio del templo Haurvatat, una elegante silueta púrpura rodeada de destellos de luz púrpura se elevó en el aire, exudando un aura extraordinaria. En el momento en que apareció, su cuerpo difundió rápidamente una luz púrpura, deteniendo inmediatamente la rotación de miles de planetas que giraban en sentido antihorario. Simultáneamente, los temblores anteriores del Templo Haurvatat cesaron en un instante. This content © 2024 .
"¡Qué poder tan formidable!" James transmitió por voz a Lesia. "¿Esta debe ser Adina Haurva, la potencia número uno del templo Haurvatat?" Lesia respondió: "Maestro, déjeme a esta mujer". "Vigila a Neville, yo me ocuparé de ella", dijo James. Cerró los ojos ligeramente y una luz sagrada de diez colores salió de su cuerpo, junto con un brillo rojo sangre, lo que una vez más hizo que los miles de planetas circundantes giraran rápidamente en sentido contrario a las agujas del reloj. En un instante, los cielos y la tierra volvieron a temblar, las montañas se derrumbaron e incluso el enorme palacio del templo Haurvatat se sacudió violentamente, al borde del colapso.
Al ver este poder de diez colores intensificado, la silueta púrpura que se cernía sobre el gran palacio de repente juntó sus manos, e inmediatamente doce Torres Lysorian brillando con un resplandor sagrado aparecieron a su alrededor. Un gran escalofrío se extendió rápidamente en todas direcciones mientras las doce torres giraban rápidamente. Después de eso, debajo de la silueta púrpura, surgieron olas y una súper inundación que llenó el cielo se precipitó hacia James a la velocidad del rayo. Al ver esta escena, James frunció el ceño. Inmediatamente movilizó los tres planetas más cercanos para interceptarlos. Lo que lo sorprendió fue que los tres planetas se congelaron instantáneamente cuando entraron en contacto con la creciente inundación. Además, la inundación restante desbordó los planetas helados y descendió sobre él desde arriba, continuando atacándolo. Con un resoplido frío, James inmediatamente realizó el paso Terrastride, dando ocho pasos consecutivos hacia adelante. En un instante, la luz sagrada de diez colores bajo sus pies se expandió una vez más, bloqueando con fuerza la inundación que llenaba el cielo. Acompañado por el sonido nítido de un crujido, la inundación bloqueada rápidamente se condensó y se congeló. Todo el enorme palacio del templo Haurvatat también quedó congelado dentro de él. James extendió las manos e inmediatamente recogió los miles de planetas que rodeaban el templo de Haurvatat. Cuando la luz púrpura circundante se retiró rápidamente, la formación protectora que custodiaba el templo Haurvatat finalmente se rompió. Para James, romper la formación significaba la victoria, pero para esa silueta púrpura, proteger el enorme palacio del Templo Haurvatat también fue un triunfo. Fue una confrontación igualada, lo que hizo difícil determinar un ganador y, en última instancia, condujo al enfrentamiento actual. Con una mano detrás de la espalda, James flotaba majestuosamente en el vacío. La silueta púrpura se condensó en una elegante mujer con una túnica púrpura, su rostro cubierto con una gasa blanca, de pie en el palacio helado del Templo Haurvatat, estaba rodeada por una luz sagrada púrpura. Neville, quien estaba cautivo por Lesia, gritó apresuradamente: "¡Hermana, mátalos! La autoridad y la dignidad del Templo Haurvatat están por encima de todo y no deben ser humilladas por otros". Cuando terminó de hablar, Lesia le golpeó ferozmente la cara con el puño. "¡Te lo dije, deja de quejarte! ¿Por qué no puedes entender palabras simples? Si tu hermana realmente pudiera hacer eso,
todos estaríamos acabados. Con tu inteligencia, el Templo Haurvatat no necesitaría que nadie lo insultara. tu existencia ya es un insulto” Neville hervía de ira. Intentó trepar desde el vacío, sólo para ser pisado con fuerza por Lesia con un ruido metálico. Al ver esto, la misteriosa mujer de la túnica púrpura apretó el puño lentamente. "Elegido, si tienes algún problema, ven a verme. No tiene nada que ver con mi hermano".