Capítulo 3666 

Mientras hablaba, se sentó al piano, abrió la tapa y sus finos dedos descansaron suavemente sobre las teclas blancas y negras. “Ser demasiado curioso no siempre es bueno, ¿verdad?” 

Mientras su voz se apagaba, el sonido melodioso del piano llenó la habitación. 

La niña observó a Roger tocar el piano y, por alguna razón, sintió un escalofrío recorrerle la columna. 

Jasper había estado practicando piano en la habitación durante una hora, pero no podía concentrarse. No dejaba de pensar en la invitación de cumpleaños de Roger. 

¿Realmente le estaba enviando un regalo a su hermana pequeña por odio hacia ella y hacia la familia Reed? ¿O tenía algún otro plan en mente? 

Incapaz de concentrarse más en la práctica, cerró la tapa del piano y salió de la habitación. 

Al pasar por la habitación de Roger, no pudo evitar detenerse. A través de la ventana de cristal de la habitación, vio a Roger tocando el piano mientras la chica que lo acompañaba escuchaba atentamente. 

Esta escena le recordó cuando eran niños y él tocaba el piano para ella mientras ella se sentaba a su lado y escuchaba su música. 

Entonces, ¿habrá encontrado a alguien más que lo escuche tocar el piano ahora?, se preguntó Jasper. Si ese fuera el caso, debería estar feliz por él. 

Después de salir de la sala del piano, bajó al dormitorio y vio a William parado allí. This text is property of Nô/velD/rama.Org.

Ella corrió hacia él y le preguntó: “¿Por qué estás aquí?” 

—Sólo quería ver si estabas aquí —respondió. 

-Entonces ¿por qué no me llamaste? -preguntó. 

—Lo hice, pero tu teléfono estaba apagado —respondió. 

Sacó su teléfono, pero estaba apagado. 

Jasper sacó la lengua tímidamente. “Mi teléfono se quedó sin batería”. 

Él sonrió. “¿Tienes algún antojo? Ya casi es la hora de cenar”. 

—¿Qué tal si salimos a comer? —sugirió Jasper—. Hoy me apetece comer algo al aire libre. 

—Por supuesto —convino William. 

Él estaría de acuerdo con cualquier cosa que ella quisiera. 

Los dos salieron de la escuela, pero Jasper se detuvo frente a un bar al lado de la escuela, mirando la puerta aturdido. 

-¿Qué pasa? -preguntó William. 

—¿Qué tal si comemos aquí hoy? —sugirió Jasper. 

Aunque era un bar, también servían comida. 

-¿Por qué quieres cenar aquí? -preguntó William. 

—Nunca he cenado en un lugar como este, así que quiero probarlo —respondió Jasper. 

Todavía no era la época de mayor actividad en el bar. 

El bar tocaba música suave, lo que lo hacía parecer bastante tranquilo. 

Jasper y William pidieron su comida y se sentaron en una mesa cuadrada. 

para gato. 

Jasper estaba cenando en el bar, pero su mirada estaba fija en otro asiento no muy lejos. 

La última vez, Roger estaba sentado allí con su grupo de amigos, bebiendo y luciendo sofisticado y distante, completamente diferente del Lawrence que recordaba de antes. 

¡Pero fue precisamente porque había crecido que se convirtió en Lawrence!