CAPÍTULO 1570

Capítulo 1570

Mientras tanto, cuando Colton bajó las escaleras, vio a Tristan, su hermano, su padre y su abuelo sentados en la sala de estar. Nollace no estaba a la vista. Caminó hacia Waylon y susurró: "¿Dónde está?"

Waylon sabía de quién estaba hablando, "El patio trasero". Colton hizo una pausa. “¡Daisie está ahí!”

Daisie se quedó en el patio trasero por un tiempo y estaba volviendo a poner Goldbar en su perrera cuando de repente se soltó y se escapó.

"¡Barra de oro!" Daisie se sobresaltó e inmediatamente corrió tras él.

"¡Goldbar, vuelve aquí!"

Goldbar corría por la hierba como un león salvaje al que hubieran puesto en libertad. Daisie se quedó sin aliento después de perseguirlo hasta un árbol y lo vio ladrarle a algo en el árbol. Daisie miró hacia arriba y vio a un gato callejero atrapado entre las ramas, mirando a Goldbar con miedo y maullando en voz baja.

Daisie se arremangó y trepó al árbol con facilidad.

El extraviado miró a Daisie con cautela. Cuando extendió la mano para liberar la pata atrapada, las afiladas garras del gato salieron disparadas y la arañaron. Daisie lo evadió rápidamente, luego frunció el ceño y fingió estar enojada, “Estoy tratando de ayudarte. ¿Cómo pudiste rascarme?

Daisle lo intentó unas cuantas veces más y trató de agarrarlo por la nuca y lentamente quitó su pata de entre dos ramas.

Luego lo acunó mientras le acariciaba la cabeza. Eso me gusta más. No hay necesidad de ser hostil, ¿verdad, Goldbar?

Goldbar se sentó en el suelo mientras miraba a su amo acunando a otro animal. No estaba feliz por eso. Nollace se paró no lejos del árbol y vio todo. La chica que trepó al árbol era tan natural, y esa brillante sonrisa en su rostro podría derretir Show Text © owned by .

Cuando Dalste bajó del árbol, notó que alguien estaba parado alrededor y se distrajo y resbaló antes de que pudiera ver quién era.

Cayó y saltó al suelo mientras el gato saltaba de sus brazos y escapaba.

Estaba adolorida pero afortunada de que el trec no fuera todo. De repente, una sombra se cernió sobre ella y una mano se estiró frente a ella.

A pesar de que el tiempo había cambiado su aspecto, todavía podía reconocerlo.

Los ojos de Nollace estaban fijos en su rostro, y un atisbo de sorpresa brilló en sus ojos, pero desapareció con la misma rapidez. "¿Estás bien?" Daisie miró hacia abajo y apartó su mano. "No te preocupes". Se puso de pie, se palmeó la falda, cargó a Goldbar en sus brazos y se alejó. Nollace se volvió para mirarla. Su instinto le dijo que ella lo odiaba. ¿Pero por qué? Era la primera vez que se encontraban.

Daisie llevó a Goldbar de regreso a su perrera y lo colocó dentro. Frunció el ceño cuando vio que Nollace se acercaba. "¿Por qué me estás siguiendo?" Él respondió con calma: "Curiosidad". "No hay nada por lo que tener curiosidad". Daisie se cruzó de brazos y miró hacia otro lado. Se alegró de que Nollace estuviera vivo, pero se molestó cuando recordó lo que le había dicho.

Ella lo perdonaría si se disculpaba, pero él ni siquiera la recordaba, así que no lo haría. Nollance frunció el ceño. "¿Es la primera vez que nos vemos?"

Daisie se mordió el labio y lo miró a los ojos. "Lo que digas."

Él la miró. "Entonces, ¿nos conocemos?"

No podía recordarlo, pero por cómo habían reaccionado ella y su hermano, podrían haberse conocido antes de esto. "No." Ella pasó junto a él.