Mierda, mierda, mucha mierda.

Esto es difícil, muy difícil de controlar.

Me siento como el viento pero mi cuerpo no es el viento.

Y esto que se parece a mi cuerpo de elfo, si no lo fuera me sería aún más difícil controlar mi cuerpo.

Pero igualmente lo siento, es un cambio drástico pero no tan grande, igualmente comparado con lo que hice anteriormente el cambio es enorme.

Es hasta diez o veinte veces más grande.

Siento que la magia de viento es mucho más fácil de hacer, es como si antes fuera un idiota.

Lo veo muy bien, toda la magia de viento no solo es 10% más eficiente sino que también 10% más fuerte.

Es fenomenal, pero no está libre de problemas.

Controlar mi cuerpo para otra cosa que no sea magia de viento es toda una odisea.

Siento que es algo que simplemente se resuelve acostumbrándome.

Mi problema es que la mayor parte de mi concentración está en hacer que mi alma se parezca lo más posible al viento.

Con un poco de tiempo lograré que esto me sea más natural, y esa es la forma en la que esto me servirá para ser más fuerte.

Si, es posible, tengo que interiorizarlo.

Tengo que hacer que me sea tan natural como respirar, como lo he hecho con mi piel que se mueve como viento.

Lograndolo podré seguir avanzando.

Y la mejor forma de hacerlo, es hacer como si ya pudiera hacerlo.

Vivir mi vida de forma natural.

Eso implica intentar luchar contra el difícil jefe de piso.

Está difícil ya que todavía no hemos logrado ningún avance, pero yo quiero mejorar más y más.

Vamos a ver que puedo hacer.

Mmm, desde aquí abajo no.

Es hora de la caminata del elfo volador.

Gracias a esta técnica evolucionable que la tengo en el mejor nivel conquiste los cielos con una gracia que hace envidiar a miles de pájaros.

Siento el viento a mi alrededor.

Y me da una sensación hermosa, es como si fuéramos amigos, igual que lo son las plantas.

Se que hacer.

Hojas las mandaré donde quiera, puedo ir por todos lados porque el viento es mi amigo.

Si quiero ir a la derecha el viento va conmigo hacia la derecha, si quiero ir abajo sucede lo mismo.

Que sensación tan maravillosa.

Todos los ataques que me lanza lo puedo esquivar con naturalidad.

Ya me siento mucho mejor con el control de mi alma y de mi cuerpo.

Siento que fue el comienzo lo más difícil, y con estos beneficios siento que me sumerjo más y más.

Comprendo más la naturaleza del viento.

Se como se mueve, se como moverlo…y hay que hacer pequeños cambios.

Intento parecerme al viento pero no se mueve como el viento mi alma.

Se siente como si un niño hubiera dibujado el viento en una hoja de papel.

Es una buena representación pero no la correcta.

El viento no se mueve de esa manera, es antinatural.

Con un cambio por aquí, otro cambio por allá.

Un poco mejor, alrededor de 10% mejor.

No mucho pero es notable.

Hay que seguir así.

Estos cambios me darán la victoria.

Me estoy volviendo mejor con el viento.

Es embriagador.

Siento que me estoy volviendo amigo con el viento.

Así que así se siente.

Es increíble.

Pero hay que seguir.

Llegó el momento de atacar un poco, no todo es esquivar.

Viento, haré uso de ti…arco, hoy no es el día.

“Conjunto de técnicas mata gigantes, Cuarta técnica, flechas ventosas de las les agujas” Y si otra técnica más.

Es que cuanto más se más fácil me es actuar.

Esta técnica es sencilla para mi pero muy difícil para otros.

Es aprovechar el viento del alrededor para lanzar las flechas con las manos poder usarlas con mucha agilidad.

Como si fuera un experto en acupuntura ir dando buenos flechazos en lugares exactos.

Parece que no es muy fuerte.

Pero es que yo usaré mil flechas y aprovecharé tanto el viento que el poder de cada flecha es algo notable.

Para mejor, como soy amigo del viento no me cuesta mucho.

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Es pedirle un favor a un amigo, un amigo que entiendo bien.

Parece que lo lanzó de forma aleatoria pero no lo es, me parece algo instintivo pero lo veo claramente, las flechas hacia donde las lanzó como si fuera un milagro prácticamente de forma inmediata aparece un fuerte viento que dirige la flecha directo al gigante de roca, y gracias a que no solo lo potenció con magia el viento sino que también el viento es ya de por sí fuerte debido a la altura en la que estamos, eso provoca que mis flechas son muy poderosas, aunque sea un gigante y sea de la poderosa tierra mis flechas lo perforan con facilidad.

¡Y son mil!

Bueno todavía no son mil pero le lanzaré mil flechas.

Por ahora el resultado está siendo bueno.

Y poco a poco lo estoy haciendo de forma más instintiva en vez de pensar tanto, es que ya entender el viento me es mucho más natural.

Cuanto más tiempo pasa más cómodo me siento y más compresión obtengo del viento.

De hecho se como cambiar mi alma para parecerme más al viento, esto de todos cambiando las velocidades no es lo correcto.

El viento apenas tiene diferencias entre sí cuanto más cerca están, y la mayor diferencia es por la altura, cuanto más alto es el viento se pone más feroz…ah, creo recordar esto de la escuela…¿La presión? era algo con ello pero no entiendo bien el porqué, tengo que ver más libros cuando salga de está mazmorra.

Como sea, mi tontería de hacer cada parte una diferencia en un kilometro por hora es estúpido, está tan cerca que la diferencia sería de tan solo un metro por hora.

Tampoco tan poco, ¿Tal vez cien metros? No, con cincuenta mejor.

Eso está bien, cincuenta metros por hora parece adecuado.

Haber estos cambios que tan bien me sienta, pero luego de terminar de hacer estos ataques.

No me da tiempo para hacer las dos cosas al mismo tiempo.

Así que primero terminaré mi nuevo ataque, y dejaré a mi instinto que tome el control de mi cuerpo por un poco de tiempo.

Creo que ya llegó el momento de que haga un cambio, está notando que con tierra no funciona, la tabla de tipos no la tomó en cuenta.

Y es en todo, haber si el señor jefe de piso se da cuenta.

Okey, cambio la tierra por el agua, resultado…igual, mis flechas son tan poderosas que dividen el agua, trata de volver a recomponerlo pero yo llevo el agua tan lejos que no le es muy eficaz.

Es momento de que haga otro cambio.

Fuego, eso sí puede ser más complicado.

El viento es fuerte pero todavía no es tan fuerte…mierda, tengo que parar, le estoy dando más fuerza y con ella mis ataques son cada vez peores y peores.

Bueno es momento de hacer el cambio, con ello podré hacer los cambios a mi alma que me hará ser más eficiente y más fuerte, creo que con ello no me pasará lo mismo que ahora.

O tal vez simplemente me acerque a eso.

Bien, me gusta la idea, a implementarla.

Así que con un poco de caminata del elfo volador y la ayuda del viento hice una retirada estratégica que me llevó a varios metros lejos de la batalla, no es un lugar muy seguro pero he reducido mucho el riesgo y tengo al mejor instinto posible.

Como las veces anteriores mi instinto me mantendrá a salvo.

Basta de cháchara que llegó la hora de hacer cambios.

Un poco de reducir la velocidad, como había pensado en un principio pero eso no es todo, también haré que las divisiones pasen de veinte a veinte y cinco.

No es mucho, pero es un avance más, la idea es que sean miles de divisiones, pero no se llega al mil de un número a otro.

Un aumento de un 25% es mucho.

Haber que tan eficaz son estos cambios.

Jejeje, mis compañeros quisieron hacer lo mismo, pero no están pudiendo.

Fuego contra fuego, una lástima que su fuego no sea tan fuerte.

No parecen haberse involucrado en el alma.

Toda su adaptación solo está en su cuerpo.

Y con su rango de plata-alto.

Tsk, no pueden hacer mucho.

El jefe de piso tiene un poder inmenso y su alma cambia constantemente a distintos elementos.

Y también lo acompaña con su cuerpo físico.

O más bien el cambio en su alma provoca el cambio físico.

Pero son tantos elementos que no es muy experto.

Siento que ya estoy a su nivel.

Veo su alma y aparte de ser más como la naturaleza y yo mantener mi forma de elfo no hay mucha diferencia.

Ellos tienen mucho que mejorar si quieren llegar a nuestros niveles.

Me estoy volviendo muy fuerte.

Tan fuerte que siento que soy capaz de luchar contra un rango oro.

Tal vez uno que recién haya avanzado.

Me encanta esto, me encanta mejorar más y más.

Es embriagador.

Como lo amigo que soy con el viento.

Ahora somos amigos más íntimos gracias al último cambio que hicimos.

Siento que mejore otro 10%.

Estos pequeños cambios son muy grandes.

Voy a hacer la misma táctica.

El sigue con el fuego.

Haber si ahora soy lo suficientemente fuerte.

“Conjunto de técnicas mata gigantes, Cuarta técnica, flechas ventosas de las les agujas” Justo cuando lancé mi técnica ocurrió algo que no esperaba.

“Es la hora Styx”

“¡Tempestad de los Dioses!” Aprovechando mi ataque Styx y Raino Mirje metieron su mano creando un ataque totalmente único y devastador.

El fuego de Raino Mirje apareció en toda la zona de batalla.

Y era un fuego azul, uno mucho más poderoso que el normal.

Por si fuera poco todo el viento que utilice hizo que el fuego sea más numerosos y por ende poderoso.

Parecía que mis flechas se iban a quemar pero eran de tan buena calidad que resistió el momento en el que llegó la ayuda.

Ayuda en forma de rayos, de alguna manera creo para cada flecha una especie de armadura de rayos qué no solo le permitió no quemar la flecha con el fuego.

Sino que también aprovechará los tres poderes.

Aprovecha el viento mio, los rayos de Styx y el fuego de Raino Mirje.

Es tan buena la combinación que la potencia de cada flecha es terrorífica.

Siento que una sola me llevaría a los brazos de mi madre.

Y para cómo no hacerlo.

Está impulsada por un feroz viento.

Tiene rayos por todas partes y aparte un fuego azul.

Para peor no son pocas flechas, son mil…mierda no tengo tantas.

Bueno creo que ni llegará a las cien.

¿Qué puede hacer contra esto?

“Mierda” Y tras esa palabra el jefe de piso cambia de nuevo, está vez parece tenerla tan complicada y no se le ocurre nada mejor que hacerse bolita.

O dicho de una manera más elegante poner todo a la defensa.

Y lo hizo haciéndose de una piedra negra; creo que es obsidiana, eso es muy duro, demasiado duro.

Pero está técnica es muy poderosa, cada flecha provoca daño devastador, rompe una gran área del jefe de piso, no importa que sea tan grande como un titán, frente a lo numeroso de nuestros ataques y la potencia de cada uno no le quedaba de otra más que caer.

Uno provocaba un daño notable, diez no se podía ignorar…cien, lo dejó tieso, literalmente tieso, o mejor dicho dejó de existir.

Aunque en verdad no, esto es una mazmorra los monstruos no mueren, son semireales.

O algo así, no entiendo bien.

“Muy bien pensado, me han sorprendido, han creado un gran ataque aprovechándose de mí, pero la próxima vez no funcionará, no tendrán mi apoyo o no estaré. Hay que seguir mejorando chicos, sino se quedarán atrás” Un poco resentido fui a molestarles, quería ganar por mi mismo….mierda.