¿Quien soy? ¿Qué hago? ¿Qué tonterías me está diciendo? Ah cierto soy Vinia la Diosa Verdadera de los elfos y una general, ahora mismo estoy en una reunión con el comandante encargado de este planeta, él es de rango leyenda y hace años que está luchando en este planeta, se nota que es un buen guerrero, tiene bastante cicatrices si eso no es un buen fundamento no se cual seria, además está todo el tiempo con su armadura de acero, preparado para cualquier situación, un experto, tan experto que no puedo ni ver su piel por culpa de las placas de acero.
“Paremos con los saludos. ¿Como es la situación ahora?” Cansada de un minuto en que me lamieran las botas lo pare al mínimo tiempo de respiro que me dieron.
“Ah horrible, que suerte que llegaron si no estaríamos peor, antes teníamos la situación controlada, en menos de 10 años íbamos a limpiar este planeta, pero con los eventos recientes no sabemos si siquiera podemos ganar, por lo menos ahora con ustedes estaremos más igualados” Por fin el comandante me da información importante, tuve que soportar 1 minuto de pura tontería y eso que fui a su tienda, el ser de rango leyenda no significa que puede andarse con tanta tontería.
“Estamos en una mala situación, sin más refuerzos solo hay una forma de poner la situación a nuestro favor, las estrategias, un experto del tu gueri ganará la partida aunque el otro tenga mejores cartas” Dije con un dedo levantado a la altura de mi nariz.
“Ya usamos la estrategia, pero supongo que tenemos que luchar como los viejos tiempos, cada vez más raro, más impredecible, destrozando cabezas de orcos con asombro.
Pero me preocupa si podremos hacer estrategias a tal nivel, ya se han hecho muchas y las que funcionaron la hemos usado muchas veces en estos tiempos. ¿Crees que hay más Diosa?” La locura impregnó al comandante por un tiempo para luego desaparecer y dar paso a la preocupación.
“Todo se transforma y se renueva, no te tienes que preocupar de no tener nuevas estrategias, entiende, cada batalla es un mundo diferente. ¿Como la mejor manera siempre será igual a la hecha en otro mundo?” Decepcionadamente le tuve que decir estas cosas yo, se supone que el tiene experiencia, debería saberlo.
“Sabias palabras, se nota que eres una Diosa” Unas simples palabras me dijo pero me impactó mucho. ¿Seguía lamiéndome las botas?
“Ah, pasemos al plan. ¿Cómo abordaremos esta guerra?” Suspirando le pregunté.
“Como sabes nuestra misión es limpiar este planeta de todos los orcos, ya te has topado con uno de los peligros de este planeta, la horda móvil de los orcos, una gran cantidad de orcos que recorren este planeta destruyendo todo lo que se encuentran, pero ellos son el menor problema, ni siquiera las grandes hordas son una gran amenaza” El comandante me habla mientras que saca unas imágenes de cómo sería una horda, sip es lo que enfrentamos.
“Hmmm, lo podemos usar como entrenamiento práctico” Enseguida el fuego de las ideas se prendió en mi cabeza.
“Es una buena idea Diosa, generalmente solo lo matamos de manera aplastante. ¿Dices que deberíamos hacer duelos más parejos? Así podríamos entrenar más” De inmediato entendió el comandante.
“Los orcos aumentaron su poder, nosotros también debemos aumentar nuestro poder” Con decisión dije.
“Tienes razón, haré unos planes para entrenar usando las hordas pequeñas, no las hordas grandes porque son un problema, es imposible usarla para entrenar o al menos para nosotros” El comandante dice mientras se toca la barbilla.
“Un buen arreglo, si encuentras alguna llámame” Sin problemas acepte su arreglo.
“Claro, claro, volviendo al tema, las hordas no son el mayor problema, ese puesto sin lugar a dudas se lo llevan los asentamientos, o mejor dicho intentos de fortaleza, desde que el reino orco se creó hubo bastantes avances en ellos, no eso sería decir una mentira, hubo avances en copiarnos, sus asentamientos que antes eran solo lugares para comer y para dormir, ahora tiene muros y guardias estacionados permanentemente, hay poco tiempo el que tenemos antes de que por el ruido los orcos de la lejanía vuelvan, y eso incluyen hordas de todo tipo de tamaño, en poco tiempo el asentamiento estará lleno de orcos. Destruirlos por mucho es la mejor forma de matar orcos, aunque la más difícil” Sin pizca de miedo dice el comandante, parece que los asentamientos son los verdadero desafíos.
“La diferencia con antes son los muros y la guardia permanente ¿Era así? Es un avance preocupante pero todavía no es un problema serio. ¿Qué usan de murallas? Adivinare apilan rocas” No tengo pruebas pero tengo menos dudas, ellos son orcos.
“Si, además rocas y palos de madera” El comandante me lo confirma.
“Je, tontos orcos” No me lo pude contener me fue imposible.
“Si son unos tontos, pero te hable de los asentamientos por algo, prepara tu ejercito que en dos semanas nos vamos a asediar un asentamiento, aunque no lo destruyamos debemos matar millones de orco” Con la sonrisa que no rivaliza con la que tengo ahora me dijo el comandante.
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“¡Si Comandante! ¡En dos semanas te veré con mi ejército! ¡Este general se despide!” Rápidamente le grite todo con la máxima disciplina de soldado que tengo, cuanto antes salga de aquí menos posibilidades hay que me vuelva a lamer las botas.
“¡Qué te vaya bien! Espero que se acuerde de mí, que de alguna manera seguro que por lo que dije hoy voy a tener algún beneficio” Y como siempre el 99% me hablan con tanto respeto solo para obtener algún beneficio de mi, ¿Como era esa frase de mierda? “A quien me trate mal lo haré sufrir 100 veces y a quien me trate bien le volveré 10 veces” O algo así, es pura tontería, el modo correcto de tratar a las personas es así “ A quien te trate mal, no caigas tan bajo como él, pero no lo trates bien, a quien te trate bien trátelo mejor, a quien te ignore, ignóralo, a quien busca beneficio de ti, ni le des una migaja de pan” o al menos es como lo veo, sip Vinia sos mejor que ellos.
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Al salir me encontré con millones tiendas de campañas y rodeándolas todas hay un gigante muro, adentró del muro además de las tiendas de campañas hay miles torres de guardia y en el suelo hay millones de soldados caminando ocupándose de sus asuntos; esta fortaleza es 100% hecha para ser eficiente, aunque todavía no vi que armas de defensas hay, pero me imagino que las mejores.
Mientras voy a mi lugar designado pienso en estrategias, tengo 2 semanas para pensar en estrategias para asediar el asentamiento de los orcos, mmm tuve que pedirle un mapa del asentamiento orco; bueno uno de estos días lo haré o algo mejor, jeje habrá una pobre alma desafortunada hoy.
En poco tiempo llegue a mi lugar designado, llegue tan rápido gracias a mi fuerza y que no era tan lejos.
“¡¡¡Atención tengo una noticia que dar!!!” Tras mi fuerte grito todo mis soldados sanos se me acercaron y los que estaban heridos pero podían moverse también, en cuanto a los que ni se pueden mover, todos sus esfuerzos se enfoca en escuchar atentamente la noticia.
Tras esperar unos minutos y ver que ya nadie más viene comencé.
“¡¡En dos semanas asediáremos un asentamiento orco!! ¡¡Mientras tanto vamos a entrenar!! ¡¡Aparte del entrenamiento normal de 8 hasta las 12, tendremos desde las 14hs hasta 18hs matando hordas de orcos!!” Tras dar la noticia fui a la campaña más grande de los alrededores, otra reunión me toca.
“¡¡¡A la guerra!!!”
“¡¡¡Ha batalla!!!”
“¡¡¡Ha ha ha otra batalla!!! ¡¡¡Perfecto!!! ¡¡¡La anterior fue muy corta!!!”
“¿Otra batalla? ¿Más muerte? ¡! Será mi turno”
Ah y eso que avisamos más de una vez, si no puedes soportarlo porque viniste, dije que era cruel la guerra pero parece que algunos no pueden entenderlo.
“Ya llegue, toca esperar” Y en menos de un minuto vinieron todos los de rango épico, ¿? Somos uno más, genial.
“Estamos todos Hermana” Jader me da la confirmación que necesito.
“Bien, felicidades Kuper, bueno ya me pongo al tema, dos semanas son lo que tenemos, ehhh Kuper ve con el comandante y pídale el mapa del asentamiento orco, a ti no te dirá tonterías.
Más seriamente aparte de entrenar en este tiempo vamos a armar estrategias, pero para eso antes necesitamos el mapa, piensen fuera de la caja para armar estrategias, quiero unas cuantas para la semana que viene” Con majestad y dignidad les hable.
“Haremos nuestro mejor esfuerzo” Un treebol con calma dice.
“No somos buenos en esas cosas, solo dinos que hacer” Típico de Dragones de colores, muy temperamentales, no les pidas pensar mucho que les da derrame cerebral.
“Si si, tu solo dime donde y cuando golpeo, nosotros solo nos encargamos de golpear” Un Dragón rojo complementa lo dicho por el Dragón verde.
“Ah, pasemos de esto, tampoco esperaba mucho de ustedes, Dita, tu y tus súcubos se encargaran de encontrar hordas y avisarnos si vienen más enemigos, con un equipo de 10 mil vamos sobrados, pero cada una hora cámbialos, así no pierden mucha experiencia” Pasando a otra parte le hable a mi hermana.
“Bien nos encargaremos de esta cosa” De inmediato Dita acepta.
“Bueno bueno, prepárense que dentro de poco son las 14” Tras un aplauso y unas palabras me fuí.
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Unas horas después, estamos en medio de una batalla contra los orcos, nosotros ganamos en números, pero en fuerza no, igualmente la batalla está a nuestro favor abrumadoramente, por eso nos contenemos a propósito, solo lucharemos con el 10% de nuestros números, sino no sería una batalla en cambio se nombraría masacre, y aunque es genial masacrar orcos, pero los recientes acontecimientos nos hizo imposible estar tan cómodos.
Prefiero cortarme un brazo que perder todo el cuerpo, aunque eso no signifique que no me duela, no, me duele mucho, me duele demasiado, tanto que da para llorar.
Pero debo ser fuerte, si yo no soy fuerte. ¿Como los elfos serán fuertes? Prometimos que íbamos a crecer, y lo estamos haciendo.
“¡Me vas a seguir ignorando! Eres una puta cómo me quieres ignorar” El líder orco interrumpe mis pensamientos con su asqueroso aliento y sus grotescas palabras.
“Ya muérete ” Y con un swang en la cabeza esté orco perdió su cabeza.
“¡El líder perdió!”
“¡¿Como es eso posible?!”
“¡Ha vengaré al líder!”
“¡A vengar al líder!”
“¡Por el líder!”
“¡Venganza!”
Uff agradezco los tontos que son los orcos, tenía un poco de miedo en que huyeran pero no, todos los orcos de rango épico van a por mi, son unos cinco, servirá para entrenar.
“¡Dale vengan orcos estúpidos! ¡Ha ha ha hoy será un día de pesadilla para los orcos! ¡Ha mueran!” Con una risa maníaca empecé mi segundo round, un 5 vs 1, poco relevante, voy a solo hacer lo mínimo, ya que su nivel es muy pequeño para ser un verdadero desafío, me enfocaré en mis soldados, como una buena general debe hacer.
Mis elfos están con la mirada llena de decisión sin espacio alguno para la compasión mientras dispara flechas hacia los orcos, comparando con la anterior batalla es mucho peor, las flechas dan a su objetivos mucho menos, y cuando dan no causa tanto daño como antes, pero no es que mis elfos empeoraron, es porque la fuerza de los orcos aumentaron.
A los enanos les cuesta más resistir sus golpes, se hieren a un ritmo mucho más rápido que antes.
La magia de los súcubos y dragones es más ineficaz que antes.
Los treebols le cuesta bastante más controlar con sus raíces y ramas a los orcos, y cuando lo hacen dura mucho menos.
Me arrepiento ser tan débil, si fuera más fuerte una emboscada no me haría nada.
“Ah, si que se perdió bastante, un pequeño error y las consecuencias son gigantes... suena genial, nueva frase obtenida ¡Que miras orco de mierda!” Y otro muerto con un swang de mi espada impulsada con magia de viento.
¿Los días siguientes serán así? Vaya rutina de mierda.