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Capítulo 842

Capítulo 842

En la madrugada, de repente se levantó un fuerte viento en el mar.

El pequeño bote tenía dificultades para avanzar, y en varias ocasiones estuvo a punto de volcarse por las olas.

El rostro del barquero se tensó mientras hacía señas con las manos a Rick.

Fue entonces cuando Carol se enteró de que el barquero era mudo; estaba usando lenguaje de señas para decirle a Rick que el viento se estaba volviendo más fuerte y que probablemente pronto llovería fuerte. Sería muy peligroso continuar navegando.

Rick parecía haber previsto ya el clima; su expresión apenas cambió.

Miró la hora y le dijo al barquero, “Sigamos el plan.”

El barquero asintió y continuó remando.

Rick se dirigió al otro lado de la embarcación, trajo dos equipos de buceo y le preguntó a Carol, “¿Sabes cómo ponértelo?”

Carol frunció el ceño, “¿Vamos a entrar al agua?”

“Sí, el viento es muy fuerte y pronto lloverá. No es seguro quedarse en el barco.”

Carol preguntó instintivamente, “¿Y en el agua sí es seguro?”

Rick le respondió con paciencia, “Te llevaré a un lugar seguro. No es conveniente llegar allí en el bote, así que nadaremos.” owns all content.

Carol no quería entrar al agua; le daba miedo incluso nadar de día, ¿cómo haría de

noche?

Rick parecía entender sus temores y la consolo gentilmente,

“No tengas miedo, estoy aquí contigo. Te protegeré.”

Justo después de que Rick terminara de hablar, un rayo rasgó el cielo en la distancia, seguido por un estruendo de trueno sobre sus cabezas.

Carol se estremeció de miedo.

Definitivamente, el clima adverso hacía peligroso quedarse en la embarcación; fácilmente podrían ocurrir accidentes.

Se apresuró a ponerse el equipo bajo la guía de Rick, por si acaso.

Desde que tuvo un hijo, se había vuelto especialmente temerosa por su vida.

Justo cuando terminaba de prepararse, sin estar aún mentalmente lista, una ola golpeó y la lanzó directamente al agua.

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Capítulo 842

Carol estaba aterrorizada, cerró los ojos y comenzó a luchar frenéticamente en el agua.

A pesar de llevar puesto el traje de buceo y el equipo, y de que Rick la atrapara en el

momento en que cayó, el miedo la invadió completamente, sintiéndose como si su alma estuviera a punto de escapar.

En el agua, se debatía y en su mente llamaba repetidamente el nombre de Aspen.

¡Solo Aspen podía darle una sensación de seguridad!

Mientras tanto, en un camino solitario, Aspen aceleró su coche hasta casi 200 km/h.

El camino estaba lleno de baches y era difícil de navegar; el coche se sacudía tanto que casi se volcó varias veces.

Aspen fruncía el ceño, concentrado en la carretera frente a él, con el corazón apretado de

dolor.

No sabía cómo estaba Carol en ese momento, solo sabía que ella era miedosa y le temía al agua.

Después de ser secuestrada por Rick y llevada por agua, ¡seguro estaba aterrorizada!

Aspen apretó los labios, su rostro tenso, aceleró al máximo, deseando poder hacer volar

el coche.

Solo cuando ya no había camino, giró bruscamente el volante, soltó el acelerador y pisó

el freno.

Con una maniobra impresionante, el coche se detuvo con firmeza.

Aspen abrió la puerta del coche y salió, caminando a grandes pasos bajo la lluvia torrencial.

Gael se apresúró a seguirlo.

La vegetación era densa alrededor, claramente un lugar al que nadie había venido en mucho tiempo, sin caminos visibles ni la superficie del mar a la vista.

Pero se podía oír el sonido de las olas golpeando la costa.

Los truenos retumbaban constantemente sobre ellos, y la lluvia empezó a caer sin aviso.

Gael no sabía qué hacía Aspen allí, pero sabía que Aspen nunca actuaba sin propósito.

Caminó bajo la lluvia, siguiendo a Aspen en silencio.

Después de caminar unos diez minutos, finalmente vieron el mar.

Un relámpago iluminó el mar tempestuoso frente a ellos.

Las olas rugían y rodaban, emitiendo peligro por doquier.

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apitulo 842

El teléfono de Gael sonó de repente.

Después de escuchar lo que le decían, miró a Aspen,

“En la línea 5 han encontrado algo, un pequeño bote flotando en el mar, parece que quiere acercarse a la costa pero duda, moviéndose sin rumbo fijo. Está demasiado lejos para

ver cuántas personas hay a bordo, pero es muy sospechoso. ¿Vamos allí? Queda a media hora de camino.”

Capítulo 843