CAPÍTULO 152

Capítulo 152 Regalos El ama de llaves respondió y fue a la sala de regalos. Todos los demás estaban esperando ver los regalos. Gloria y Angela no solo eran primas, sino también la ex novia y novia de Jordy. Sin embargo, ambas eran cercanas a la familia Collins y cada una tenía patrocinadores. Karen y Newell estaban del lado de Gloria, mientras que El viejo Joseph y Olivia estaban del lado de Angela En cuanto a Jordy, Angela fue su salvavidas. En cualquier caso, Angela ganaría, pero dijo que nunca se casaría con Jordy. Por lo tanto, esto se complicó y estaban en campamentos caóticos . Los demás todos querían verse la cara . Desde que Jordy y Gloria se divorciaron, había farsas.

Ángela necesitaba mostrar su don, así que no se sentó sino que esperó a un lado . Lillian tenía una mirada orgullosa en sus ojos. Miró a Gloria, como si Gloria estuviera destinada a perder. ¡Ángela estaba hosca, Lillian era como una idiota! ¿Por qué tenía esa mirada como si estuvieran obligados a ganar 10? Rápidamente le guiñó un ojo a Lillian, y luego Lillian borró esa mirada de su rostro Angela 100k una respiración profunda y miró a Gloria con una sonrisa suave, “Gloria, no esperaba que le ofreciéramos regalos a la abuela juntos, pero es un honor para nosotros para hacer esto nogether, ¿verdad?

En ese momento, Ángela actuó como un anciano que estaba consolando a una persona que estaba a punto de perder el juego, como si no fueran a comparar sus dones sino que simplemente los presentaran juntos. Gloria asintió, “Tienes razón”. Ángela sonrió y miró al ama de llaves que había sacado los regalos. Ella susurró: ‘El ama de llavesCcontent © exclusive by Nô/vel(D)ra/ma.Org.

regresó. Cada regalo estaba marcado con los nombres de sus donantes. El ama de llaves entregó los regalos sin abrir a las dos personas, respectivamente . Gloria mira el regalo. Quería dárselo a la abuela antes, pero la abuela no lo tomó. Le pidió que llevara el regalo a la fiesta de cumpleaños. Sin embargo, todo era excusa de la abuela. Lo que realmente quería hacer era anunciar que era su nieta en la fiesta de cumpleaños. Cada paso de la abuela era para ella. Tenía mucho miedo de que la abuela viera el regalo de Angela más tarde. Incluso quería… arrebatarle el regalo a Ángela y evitar que lo mostrara.

Jordy miró a Gloria. Estuvieron casados durante tres años, por lo que podía sentir que ella se estaba poniendo cada vez más nerviosa . ¿Qué la ponía tan nerviosa? Nydia se acercó con una sonrisa, “¡Qué aburrido es abrir los regalos ustedes mismos! Señorita Jones, ¿de acuerdo? Lillian esperaba esto. Ella dijo con una sonrisa: ‘Está bien, le abriré a Angela’. Nydia tomó el regalo de Gloria y apretó la mano de Gloria por el camino, como para tranquilizarla. Gloria frunció los labios y miró hacia otro lado. Luego, abrieron los regalos juntos. Ángela se paró no muy lejos de Karen con una suave sonrisa en los labios. Todos miraron en su dirección. Si no estuvieran en una ocasión tan especial, se habrían puesto de pie para ver esto. Las personas que estaban cerca de ellos podían verlo sin ponerse de pie. Lillian y Nydia no fueron lentas. Obviamente, tenían mucha confianza en los regalos que tenían en sus manos. Bajo la mirada expectante de todos, las cuerdas de los dos regalos fueron desatadas.

Capítulo 152 Regalos

El ama de llaves respondió y fue a la sala de regalos. Todos los demás estaban esperando ver los regalos. Gloria y Angela no solo eran primas, sino también la ex novia y novia de Jordy. Sin embargo, ambas eran cercanas a la familia Collins y cada una tenía patrocinadores. Karen y Newell estaban del lado de Gloria, mientras que El viejo Joseph y Olivia estaban del lado de Angela En cuanto a Jordy, Angela fue su salvavidas. En cualquier caso, Angela ganaría, pero dijo que nunca se casaría con Jordy. Por lo tanto, esto se complicó

y estaban en campamentos caóticos . Los demás todos querían verse la cara . Desde que Jordy y Gloria se divorciaron, había farsas.

Ángela necesitaba mostrar su don, así que no se sentó sino que esperó a un lado . Lillian tenía una mirada orgullosa en sus ojos. Miró a Gloria, como si Gloria estuviera destinada a perder. ¡Ángela estaba hosca, Lillian era como una idiota!

¿Por qué tenía esa mirada como si estuvieran obligados a ganar 10? Rápidamente le guiñó un ojo a Lillian, y luego Lillian borró esa mirada de su rostro Angela 100k una respiración profunda y miró a Gloria con una sonrisa suave, “Gloria, no esperaba que le ofreciéramos regalos a la abuela juntos, pero es un honor para nosotros para hacer esto nogether, ¿verdad? En ese momento, Ángela actuó como un anciano que estaba consolando a una persona que estaba a punto de perder el juego, como si no fueran a comparar sus dones sino que simplemente los presentaran juntos. Gloria asintió, “Tienes razón”. Ángela sonrió y miró al ama de llaves que había sacado los regalos. Ella susurró: ‘El ama de llaves regresó. Cada regalo estaba marcado con los nombres de sus donantes. El ama de llaves entregó los regalos sin abrir a las dos personas, respectivamente . Gloria mira el regalo. Quería dárselo a la abuela antes, pero la abuela no lo tomó. Le pidió que llevara el regalo a la fiesta de cumpleaños. Sin embargo, todo era excusa de la abuela. Lo que realmente quería hacer era anunciar que era su nieta en la fiesta de cumpleaños. Cada paso de la abuela era para ella. Tenía mucho miedo de que la abuela viera el regalo de Angela más tarde. Incluso quería… arrebatarle el regalo a Ángela y evitar que lo mostrara.

Jordy miró a Gloria. Estuvieron casados durante tres años, por lo que podía sentir que ella se estaba poniendo cada vez más nerviosa

. ¿Qué la ponía tan nerviosa? Nydia se acercó con una sonrisa, “¡Qué aburrido es abrir los regalos ustedes mismos! Señorita Jones, ¿de acuerdo? Lillian esperaba esto. Ella dijo con una sonrisa: ‘Está bien, le abriré a Angela’. Nydia tomó el regalo de Gloria y apretó la mano de Gloria por el camino, como para tranquilizarla. Gloria frunció los labios y miró hacia otro lado. Luego, abrieron los regalos juntos. Ángela se paró no muy lejos de Karen con una suave sonrisa en los labios. Todos miraron en su dirección. Si no estuvieran en una ocasión tan especial, se habrían puesto de pie para ver esto. Las personas que estaban cerca de ellos podían verlo sin ponerse de pie. Lillian y Nydia no fueron lentas. Obviamente, tenían mucha confianza en los regalos que tenían en sus manos. Bajo la mirada expectante de todos, las cuerdas de los dos regalos fueron desatadas.