CAPÍTULO 1740

Capítulo 1740

Pablo sonrió. “A Su Majestad simplemente le gustaría tener una charla con la Sra. Vanderbilt”.

Daisie se quedó en silencio por un momento antes de mirar hacia arriba. "Está bien, iré contigo". Luego se volvió y habló con Freyja. "No te preocupes, volveré pronto".

Siguió a Paul al coche.

Los estudiantes a su alrededor comenzaron a murmurar mientras Freyja observaba cómo se alejaba el auto, fruncía el ceño y le enviaba un mensaje a Nollace.

Mientras tanto, el automóvil conducía lentamente hacia el White Ivy Palace.

Se plantaron árboles sicómoros a ambos lados del camino de entrada.

Daisie miró por la ventana y vio un gran palacio antiguo en medio de un enorme y amplio jardín de rosas.

El amplio césped era un campo de golf, y había estatuas de deidades de pie frente a la puerta principal. Fue una vista única.

Las banderas reales ondearon bajo el cielo azul.

Daisie salió del auto y siguió a Paul, quien la condujo al salón principal. Del techo colgaba un candelabro gigante hecho con bronce dorado. Tenía casquillos de marfil y vidrio que podían contener 96 velas.

Pasaron por un largo corredor sobre una alfombra suave que cubría baldosas de granito hasta el salón.

Había esculturas artísticas en el manto junto con pinturas, haciendo que todo el lugar pareciera una obra de arte en sí mismo.

Paul la llevó a un sofá con un respaldo alto, se dio la vuelta e hizo una reverencia. "EM. Vanderbilt, por favor espere aquí. Informaré a Su Majestad de su llegada.

Daisie asintió. Después de que Paul se fue, se paró frente a la ventana que daba al jardín de rosas y los árboles. Todo el palacio parecía sacado de un cuento de hadas: hermoso, romántico y elegante.

Cuando escuchó ruidos en la puerta, se dio la vuelta y vio a un guardia abriendo la puerta.

Un anciano majestuoso con traje oscuro y sombrero entró con un bastón dorado.

Pablo caminaba detrás del rey Guillermo. Dio un paso adelante y le susurró algo.

El rey William levantó la mano para indicarle a Paul que esperara afuera. Paul luego se fue y cerró la puerta.

Daisie hizo una reverencia por respeto. "Su Majestad." content rights.

El rey William se quitó el sombrero, caminó hacia el sofá para tomar asiento y miró a Daisie. "¿Eres la chica con la que sale mi nieto?"

Daisie reveló una dulce sonrisa. “Sí, no he tenido la oportunidad de presentarme formalmente. Mi nombre es Daisie Vanderbilt, la novia de Nollace.

El rey Guillermo agitó la mano. “Quién eres no importa para

1. Solo quiero saber si estás molestando a mi nieto.

Daisie hizo una pausa y luego sonrió. “Si estamos hablando de molestar, él me molestó primero”.

El rey Guillermo frunció el ceño. "¿Qué?"

Daisie puso su mano debajo de su barbilla, “Él apareció a mi lado y persiguió mi interés. Desarrollamos sentimientos y naturalmente nos juntamos”.

Después de eso, ella se encogió de hombros. "Supongo que ese es mi encanto".

El rey William parecía serio. “Es genial que tengas confianza, pero debes tener lo que se necesita para tener confianza. Chica, es posible que le gustes por la forma en que te ves ahora, pero tener una buena apariencia no vale nada antes que los beneficios”.

Daisie tenía curiosidad. “¿Son tan importantes los beneficios?” 1

No podía entender por qué a todos en la clase alta les encantaba perseguir esta cosa fría.

El rey William sonrió mientras le aconsejaba. “Cada necesidad humana básica requiere dinero para mantenerse. Un comercio es una transacción de beneficios, y también lo es el espíritu empresarial”.