Especial 27: Escuadrón de venganza.
*Punto de vista de Karen*
Recibí una respuesta a la carta que le mandé a Víctor Nauchin pidiendo verlo; le informé sobre el goblin que lleva el naga, así que puedo saber que aceptó mi petición sin tener que abrir el sello.
Se trata de un maníaco que gusta de coleccionar monstruos, no dejará ir esta oportunidad de conseguir uno especial.
También están la araña y el lobo, pero pienso hablarle de ellos cuando lo vea en persona, solo en el caso de que deseé echarse para atrás.
Incluso si es un partidario de la facción, su cobardía de no querer buscar problemas con mi padre lo convierten en un aliado impredecible. Pero lo necesito a él si quiero tender la emboscada.
Capturaremos a la oráculo de camino a Menat… Y esta vez, no fallaremos.
“¿No vas a abrirla? Se supone que es del hombre que nos va a ayudar.” (Richard)
“No es necesario… ¿Cuánto tiempo más va a tardar?… Tenemos que adelantarnos a ellos y llegar primero a Silvertha.” (Karen)
“No debe faltar mucho…” (Richard)
Nos detuvimos en este pueblo para comprar algo que vamos a usar en nuestra venganza: un medicamento para aumentar la potencia masculina.
Se me ocurrió que si vamos a hacer sufrir al naga obligándolo a ver como violan a sus mujeres enfrente de él, debíamos hacer el castigo lo más duradero posible.
Le conté de mi plan a los dos inútiles que vienen conmigo y aceptaron participar gustosos.
“Se supone que tiene a más mujeres a su lado, algunas son bestias y desechos… ¿Se atreverán a tener sexo con ellas?” (Karen)
“Lo haré con la maldita bruja de los naga, no me importa que no sea humana… Quiero humillarla y hacerla sufrir.” (Richard)
“Bien, quizás entre los hombres de Víctor estén aquellos que tampoco tengan problemas en revolcarse con basuras.” (Karen)
Mientras conversábamos sobre como solucionar el problema de quienes tendrían sexo con los blancos, el anciano alquimista salió de su cuarto con una botella de barro en sus manos.
“Aquí está su pedido… Les advierto que solo deben usar una gota a la vez o sus corazones se detendrán.” (Alquimista)
“Esta bien. Tendremos cuidado.” (Richard)
“Vámonos, tenemos que llegar a la próxima aldea antes de que caiga el sol.” (Karen)
…
Al entrar en la región de Goldtree, tomamos directamente la ruta hacia el sur, si íbamos hacía el noreste desde aquí llegaríamos a Jimama, donde está ese grupo de desechos, pero la ciudad es dirigida por un elfo y el Señor de esta región es un partidario de la facción de mi padre, el rey.
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Los bosques están llenos de bandidos que podemos manipular para crear caos en la ciudad y con suerte, se enfrenten al naga y lo maten… Pero si llegan a matar a la oráculo echaré todo a perder y tendré problemas con mi tío.
No se puede confiar en bandidos después de todo.
“¿Que tal contratamos algunos bandidos para que ataquen al grupo y nos ahorramos este plan?” (Richard)
Nos detuvimos a pasar la noche acampando en el bosque y planear nuestra estrategia, pero el idiota de Richard tuvo que sugerir la que acababa de desechar en mi mente.
“Estupido.” (Karen)
“Sabes, si no tuvieras a esos tres cuidando de tu trasero te…” (Richard)
Una daga en su cuello fue suficiente para silenciarlo.
“Estos tres pertenecen a la fuerza de élite de la facción… Ten cuidado de cómo le hablas a su alteza.” (hombre)
“Lo haré…” (Richard)
Aunque no pudieron prestarme el apoyo enteró de los ‘Desertores de la Ruina’, contaremos con fuerzas suficientes. Por ahora me acompañan tres.
“Me agradabas más cuando eras Diane.” (Richard)
“No me interesa. Durante ese tiempo solo estaba fingiendo.” (Karen)
“¿Incluso desde que nos conocimos en la Academia? ¿Dices que durante todo ese tiempo has estado fingiendo? Eres una mentirosa muy buena.” (Richard)
“Lo soy, ¿Algun problema con ello?” (Karen)
“¿Y todas las veces que tuvimos sexo también fingias que lo disfrutabas?” (Richard)
“No, en verdad disfruto tener sexo, aún con hombres como tú.” (Karen)
“¿Que tal ahora? ¿Te gustaría tener un poco?” (Richard)
Es tentador… Quiero hacerlo, quiero hacerlo, quiero hacerlo… Pero tengo que concentrarme en mi venganza, y ahora que mi Alex ya no está no creo que sea tan divertido…
Maldita rata del rey… Me aseguraré de torturarte hasta la muerte.
“Alteza… Nosotros no tendríamos problemas en unirnos a la diversión.” (hombre)
Mis guardaespaldas se ofrecieron para tener sexo también… Son dos mujeres y un hombre, podríamos tener acción de tres con tres…
“Está bien, un poco no hará daño…” (Karen)
Nos desvestimos todos y tuvimos sexo en el acto… Se siente tan bien hacerlo al aire libre.
…
Amanecí encima de Richard.
Anoche decidimos probar la eficacia de la poción que compramos y fue tan efectiva como lo imaginamos.
Richard, Homer y el hombre que me asignaron como guardaespaldas se corrieron dentro de mi y las otras dos mujeres como si no hubiera mañana.
Con esta pócima, un hombre podría tener sexo fácilmente con diez mujeres antes de caer rendido.
El único motivo por el que no se ha vuelto popular es por su peligrosidad en dosis mayores a una gota en menos de medio día.
“Es mucho… Se escurre.” (Karen)
Tengo que limpiarme y usar una poción contra el embarazo…
Soy el pilar de la facción de la ‘Eliminación de los ‘Sucios’, no puedo dar a luz al hijo de un don nadie.
“Ahhh… Pero quiero tanto dejarlo adentro. Se siente muy bien.” (Karen)
Al final, mi conciencia resulta vencedora sobre mi deseo y me limpié.
Solo los miembros de la brigada continuábamos dormidos hasta ahora, los guardaespaldas estaban cuidando el perímetro de ataques de monstruos, o bien, preparando todo para continuar el viaje.
“Ya es de mañana, despierten ustedes dos.” (Karen)
Son una desgracia como soldados al tener que ser despertados.
Tras vestirnos y comer un poco de pan de centeno y carne seca de lobo, partimos de nuevo hacia Menat… A este ritmo llegaremos a la región en tres días y a Silvertha en cinco… Eso solo si nos damos prisa de verdad.
Tenemos la ventaja sobre el blanco, que viaja con carruajes.
“No puedo esperar…” (Richard)
“No comas ansias. Los naga han perdido sus fuerzas estando fuera de Tulser, pero los monstruos que traen consigo son muy poderosos… Pudieron decimar a la banda de ladrones más peligrosa y escurridiza de la región.” (Hombre)
El guardaespaldas nos informó de que tal hazaña convirtió al naga en el héroe de la región.
“Malditos traidores… Alabando a un desecho.” (Richard)
El rostro de Richard se distorsionó en una mueca de profundo odio… Es cierto, una de las razones por las que odia a la raza de los naga es por lo admirados que son.
“Y ni siquiera fue él, sino sus monstruos…” (Richard)
“Eso habla de lo mucho que tenemos que cuidarnos de ellos.” (Karen)
“Si…” (Richard)
“Descuida… Víctor se especializa en cazarlos; según lo que me contó, tiene a dos subordinados a su mando que son capaces de luchar contra monstruos de nivel A por cuenta propia cada uno.” (Karen)
“Perfecto… El naga va a caer.” (Richard)
Asentí al ver la sonrisa de Richard.
Alex… Mataré al que te apartó de mi lado y cumpliré nuestro sueño de una Eralgia pura y libre de desechos.