Especial 10: Secreto de malas intenciones
*Punto de vista en tercera persona*
La noche había caído en el campamento, Aruh y sus chicas dormían en la misma tienda luego de otra noche intensa.
Dado que Arachne no necesitaba de mucho sueño, ella era la vigía del equipo, cuidando de que no se acercara nadie. Barker, a pesar de ser un cachorro tenía unos instintos animales muy desarrollados, su sueño era muy liviano y podía despertarse ante el menor estímulo de una amenaza.
Los dos hacían un gran equipo cuidando de su compañero y sus mujeres.
Eugene era también muy dedicado, sin embargo, al ser humano necesitaba dormir; de todas formas, se esmeraba para cumplir un turno de vigilancia para entrenarse en caso de ser necesario.
Sin embargo, también había otras personas haciendo guardia, o más bien... vigilando.
"¿Los dos monstruos siguen despiertos?" (Richard)
"El cachorro de lobo está dormido junto a la tienda, pero la araña sigue alerta." (Alexander)
"Tch, la presencia de esos dos monstruos van a dificultar nuestra tarea... ¿Hay alguna forma de deshacernos de ellos?" (Richard)
"No pude cerciorarme de su fuerza mientras los vimos entrenar... Y los reportes de la gente que cuidaba de ellos dicen que pasaban todo su tiempo en el bosque del señor Marcus." (Alexander)
Alexander había estado observando a Aruh y los suyos. En lugar de cuidar del campamento de ataques de monstruos, él y el resto de los soldados se dedicaban a espiar los movimientos de aquellos que debían proteger.
"¿Qué me dices de viejo?" (Richard)
"El se fue a dormir hace poco... Se esmera mucho por el naga." (Alexander)
"Un humano al servicio de un naga, ha perdido su dignidad por servir a ese desecho... Su vida no puede ser perdonada." (Richard)
Richard mencionó la palabra 'desecho' con odio en su voz.
"Su personalidad cambió al recibir la armadura y la espada del naga; quizás lo sigue por conveniencia." (Alexander)
Cuando la brigada vio los regalos que Aruh le había dado a Eugene, sus rostros reflejaron una gran sorpresa; también sintieron envidia al ver las armas y armaduras para unidades de bajo rango que ellos usaban.
"Mi padre y mi hermano me hablaron hasta el cansancio de un naga de grandes habilidades que planeaba ser herrero... Pensar que los malditos enanos le transmitieran sus secretos..." (Richard)
"Podríamos torturarlo para sacarle sus conocimientos una vez que cumplamos el plan..." (Alexander)
"Me parece buena idea. Haremos que presencie como violan a esas mujeres enfrente de él... En especial de esa maldita de cabello azul." (Richard)
Los ojos de Richard se llenaron de un gran odio al recordar el día en que se ofreció a ayudarles a entrenar. La intención era darse una idea de las capacidades que tenían Aruh y sus acompañantes, pero terminó en una rotunda humillación enfrente de todos a manos de Naku.
"Necesitamos a la oráculo con vida, ella es una pieza con mucha importancia." (Alexander)
"Nunca hablé de matarla, solo de hacerla desear que lo hiciéramos." (Richard)
"Pero para llevar a cabo ese deseo primero tendrás que encontrar la manera de incapacitar a todo el grupo. Los dos naga y la morunke son fuertes, el viejo también es bueno y los dos monstruos parecen ser en especial poderosos... La única persona débil de entre todos es la concubina de cabello negro." (Alexander)
"Los naga perderán su fuerzas cuando salgan de Tulser, no es necesario preocuparse de ellos; la morunke es una estúpida que confía en otros y baja la guardia con facilidad, y el anciano no parece nada especial. En los que debemos de enfocarnos son en los monstruos... Debemos formular un plan para exterminarlos o separarlos de alguna forma." (Richard)
Richard se puso a pensar.
"Ya sé, podríamos hacer que Diane seduzca al naga, y cuando baje la guardia, lo capturamos y lo usamos como rehén." (Richard)
"Lo veo difícil. Con las mujeres que tiene a su lado, Diane no podrá hacer nada... Por muy bella que sea." (Alexander)
"Pero es un hombre promiscuo, seguramente caerá... ¿O es que no quieres ver a Diane coqueteando con ese desecho?" (Richard)
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Había un poco de burla en el tono de voz de Richard, sabía que Alexander se sentía atraído por Diane, y le gustaba molestarlo por ello.
"...Iré a dormir, me siento cansado." (Alexander)
Fastidiado de las palabras de Richard, Alexander comenzó a retirarse.
"Te lo digo como amigo, olvida tus sentimientos por Diane, no es una mujer que te convenga... ¡Vengo de hacerlo con ella!" (Richard)
Alexander se detuvo por un instante, pero reanudó su retirada sin decir nada.
"Y recibí ayuda..." (Richard)
...
Su turno de vigilar había terminado, y la dirección que la plática había tomado le era incómoda y desagradable, así que Alexander decidió regresar a la tienda por un motivo importante.
Cuando se acercó, escucho el sonido de gemidos intensos.
Al mirar dentro de la tienda, vio a Diane haciéndolo con sus otros dos compañeros, Homer y Stuart, al mismo tiempo.
Alexander cerró la cortina de inmediato y esperó fuera de la tienda hasta que terminaran.
Los ruidos cesaron luego de un rato, y tras un breve momento de silencio, Diane salió usando solo una bata.
"Disculpa la demora, puedes pasar a dormir si quieres. Los otros dos cayeron dormidos después de terminar." (Diane)
"No quiero dormir adentro después de lo que hicieron, dormiré debajo de un árbol." (Alexander)
"¿Entonces qué haces aquí afuera esperando todo este tiempo? No me digas que ese es tu fetiche... ¿Quieres hacerlo también?" (Diane)
"La esperaba para darle mi informe..." (Alexander)
Diane sonrió de manera pícara.
"Lo sé, solo bromeaba... Sabes que eres el único hombre con el que no lo haría; sin tu frustración, no me divertiría tanto al revolcarme con cualquiera..." (Diane)
"...... Si, entiendo." (Alexander)
"¿Y bien? ¿Cual es el reporte?" (Diane)
"El poder de los monstruos es difícil de determinar, pero todo indica que son de categoría A o AA." (Alexander)
"Entonces con 50 soldados bastarían para acabar con ellos, un número importante, ¿Que hay del resto?" (Diane)
"La única que representa un riesgo es la guerrera morunke." (Alexander)
"El plan habría salido de maravilla de no ser porque a ese estúpido naga se le ocurrió ir a ver a una de sus mujerzuelas... Ahora la trampa va a tener que ser cambiada de lugar... Encargate de informarle al señor Ikuam." (Diane)
"¿No será al señor Vahata?" (Alexander)
"Será muy difícil que logre movilizar sus tropas hasta alguna de las regiones de por aquí... El señor Ikuam es el único que puede tener alcance en estas partes de Eralgia. Solo enviale una nota con nuestras intenciones y el sabrá que hacer." (Diane)
"No sabía que también el señor Ikuam estaba involucrado en nuestros planes." (Alexander)
"Son muchos los que comparten mi sueño... Aunque muchos son unos perdedores como el jefe de brigada con el que estamos, de no ser por que debemos de mantener la fachada, lo habría mandado a colgar por su incompetencia, estuvo a punto de arruinar todo por culpa de su estúpido orgullo." (Diane)
El gesto de Diane reflejaba su gran enojo y frustración.
"Acerca del jefe de brigada... Él tiene su propio plan." (Alexander)
"...Cuéntame." (Diane)
"Quiere que usted seduzca al hombre naga para usarlo como rehén contra los demás." (Alexander)
"¿Yo seduciendo a un sucio naga? ¡Es un completo idiota! No sé cómo es que permito que tenga sexo conmigo... El plan más simple a seguir es separar a los más fuertes del grupo y capturar al débil, el mejor blanco sería la humana... También podríamos usar a los hombres del señor Ikuam como un apoyo extra contra los monstruos, después los llevamos con los miembros de la orden, y así, comenzar con la operación... Si, usaremos ese plan, infórmaselo al jefe de brigada y busquen una forma de que eso suceda." (Diane)
"Como usted ordene, su alteza... Por cierto, ¿No piensa limpiarse el rostro y su pelo? Está cubierta de..." (Alexander)
"No, me gusta el olor." (Diane)
Nota del autor: Lo prometido es deuda, aquí viene una avalancha de los capitulos que tenia preparados.