Lucas y Taras se encontraban en la cocina, ya los marineros les habían indicado que pescados conservar y cuáles tirar, por lo cual lo único que faltaba era procesar algunos y guardar el resto en las cajas de suministro.

Lucas había adquirido bastante habilidad en la cocina los últimos meses, por lo que le tocó la tarea de procesar aquellos pescados que no se podían guardar de forma directa.

En este momento estaba luchando, tratando de trocear y sacarle las vísceras a la tortuga gigante que tenía enfrente, su habilidad no era mala y sabia donde colocar el cuchillo para ir deshuesando con rapidez.

Para poder ir carneando a la bestia marina, Lucas la pinchaba con una vara de metal sobre la mesa y de esa manera lograba que la tortuga no se moviera. Fue una de las técnicas que aprendió en estas 2 semanas que llevaba siendo manco, poco a poco se acostumbraba a su nuevo estilo de vida, o al menos eso aparentaba, porque más de una vez se había largado a llorar en privado por la pérdida.

Taras por su parte se encontraba almacenando los pescados en las cajas del almacén.

*Hiiiii* Rechinaba los tablones de la puerta

Los dos grumetes detuvieron sus tareas, porque habían escuchado entrar a alguien.

"Te fue bien con el capitán, Ricardo?", preguntó Lucas al ver la cara de su amigo manchada de lágrimas.

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"Si, la verdad que muy bien, parece que solo se había preocupado por lo que me había pasado esta mañana" Contestó Ricardo, acercándose a Taras para ayudarlo a guardar los pescados.

"Y te dijo algo más? Porque estuviste un buen rato y parece que estuviste llorando" Pregunto Taras con curiosidad.

"No mucho, hablamos un poco de los muchachos enfermos, pero no mucho más" Dijo Ricardo, tomando un papel amarillento, luego lo colocó sobre la caja, envolviendo su interior, y tiró los pescados, para luego colocar una especie de líquido aceitoso sobre los pescados.

"Y obtuviste algo de información? Los chicos en los camarotes están muy preocupados" Preguntó Lucas.

"No, la verdad únicamente me preguntó si había visto a alguien sospechoso" Dijo Ricardo, pero luego se arrepintió un poco de lo que había dicho y trató de ocultarlo finalizando con rapidez la preparación de la caja de suministro que tenía al frente.

Cubrió la parte superior de la caja llena de pescados con papel amarillento y luego busco la tapa de la caja y en los extremos Ricardo coloco una especie de masa grasienta similar a la plastilina, pero algo más aceitosa. Luego Ricardo coloco la tapa de la caja, parecía que la masa grasienta ayudaba en que la tapa de la caja se fijará.

*Ja, ja, ja* río Taras como un desgraciado

"El capitán te pregunto por algún sospechoso... ja, ja, ja" se rio Taras aún más fuerte, resonando por toda la cocina

'Mierda, lo noto' Pensó Ricardo, maldiciendo no haber sido más inteligente.

"Se notaba a leguas que algo raro estaba pasando, si te pidió el nombre de un sospechoso, es porque claramente hay un culpable y esto no se trata de una simple enfermedad ..." Dijo Taras sentándose sobre una caja, parecía que para el esta discusión era más importante que completar la tarea a tiempo.

"Y si no es una enfermedad, que es lo que está dejando a tantos heridos en la bodega ..." Dijo Taras, deteniéndose y mirando a los otros dos grumetes, como buscando su ayuda para lograr entender la nueva situación peligrosa a la que se enfrentaba el barco.