Novels2Search
The Silver Traveler [Español]
Cap. 23. Peligro en la Jungla. P2:

Cap. 23. Peligro en la Jungla. P2:

Tapa. 23. Peligro en la Jungla. P2:

La lluvia se detenía y el sol salía. El equipo se fragmentaba cada vez más. Steven y Félix intentaban buscar a Alex preguntando por el campamento quienes le habían visto por última vez. Gabriel y Max estaban haciendo misiones de reconocimiento mientras Alex “Regresaba” Gabriel pensaba que solo era un soñador y Max quería proteger y darle tiempo a su equipo, peor también quería su revancha y hacerlo comer lodo. Demostrando que él era el verdadero líder.

Giovanny por su parte, saboteaba las patrullas, enviando información desde el cuartel general. Era cuestión de tiempo para recibir un ataque fulminante.

Pasando el tiempo, el sol llego a medio día, después a un hermoso atardecer naranja y al final cayo la noche. Los 2 animas regresan tristes sin saber si alguien vio a Oscar o el desfile de Alex. Frustrados entrarían a una carpa prestada, tenían que ir por sus cosas aun con la nave estrellada, pero siendo casi imposible por los ataques a las patrullas.

Gabriel y Max llegarían a la carpa. El felino y la nutria mirarían preocupados a Max. Ahora con la punta faltante de su oreja derecha y heridas en todo el cuerpo. Gabriel intentando atenderlo sin mucho éxito.

-Max… Este hecho un asco…- Diría Steven preocupada.

-No tienes que enfrentarte a las patrullas tu solo… Te ayudaremos a las siguientes… solo tenemos que encontrar a Alex…- Félix sacaría un botiquín de una mochila acercándolo.

- ¡No digas ese nombre! - Respondiendo con un grito y una mirada fulminante. –Ese maldito nos dejó solo. El jamás tuvo que tomar el rol de líder… Jamás tuve que dejarlo… y aun así lo hizo- Quitándose a Gabriel de encima.

-Oye, Alex nos demostró que aún quedan esperanzas… ¡Tú mismo lo dijiste!... Thomas estaría de acuerdo, pero por ese estúpido de Giovanny tuvimos que dejarlo…- Mirando a Max mientras cierra su cuaderno. –La mejor parte es que estamos esperando para traer recursos. Solo espero que una vez el cañón fuera, pueda traernos lo que necesitamos…- Steven abriría su libro nuevamente.

-Alex esto Alex lo otro… Solo sabes seguir a idiotas, ¡no eres una mascota! – Tomando y aventando una botella de alcohol que tenía Gabriel al felino.

Con la acción le tiraría su cuaderno y con el alcohol se borraría la tinta, quedando destrozado. Steven miraría ahora si enojado a Max.

- ¡No estoy aquí para que me rebajes a mí! ¿Crees que quiero seguir a líderes que permiten el hambre y la pobreza? ¡Mi familia necesita el dinero, por eso me hice soldado! - Tomando un trozo de vidrio, cortando su mano y colocando este en la cara de Max. - ¡He escuchado las historias de Alex, mi hermano que pudo entrar en la academia gracias a que me uní al ejercito me conto! Él es distinto a todos… ¡Y aun así te crees mejor que él! - Lanzando el trozo de cristal al suelo, clavándolo cerca del pie de Max. –Él es para mí una luz de esperanza… Las historias de su padre resuenan entre la clase baja… Él puede ser distinto… Pero quiero averiguar quién es en verdad- Mirando a Max con ira. –Si seguir con el me lleva a un mejor futuro lo hare, aunque me cueste la vida. Prefiero eso a ser el muñeco de alguien controlador… Giovanny solo llego a sembrar discordia… Veas eso o no, no es mi problema- Steven saldría sin decir algo más.

Félix miraría cabizbajo a su amigo. Saliendo detrás y Gabriel una vez termino con Max, tomaría una venda y medicina sin antes decirle algo a Max.

-Puede que Giovanny te prometa poder y dinero, pero todo eso tiene un precio…. Tienen razón en algo… Alex puede que no tenga lo necesario. Pero si tiene algo que le sobra que a muchos les falta…. “Determinación”- Saliendo da la carpa.

Max reflexionaría lo que en verdad siente, regresando su dolor de cabeza. Giovanny entraría a agitar nuevamente las aguas.

-Yo no prometo nada en vano. Todo tiene su precio, es la ley del universo… Recuerda, quieres que tu familia viva bien, entonces, tienes que acabar con Alex y tu “Facción” tendrá todos los recursos necesarios hasta que fallezca el último de ellos- Tomando del hombro a Max.

-Esto lo hago por mi familia- Las venas de sus ojos empezaban a tornarse verde además del pigmento de su pelaje. –Si no tuviera este problema, estaría con Alex… no contigo- Mas sentiría su cabeza arder.

-No mi amigo, no permitas que ellos le idealicen a algo que no es- Sacando de su bolso y entregándole un fajo de billetes en un sobre. –El solo da palabras, yo tengo aquí algo más “Tangible”. Él no es un “Héroe” solo es alguien con un enorme ego y mucha suerte- sacando de su saco un Whisky, sirviendo 2 copas. –Por nuestra alianza amigo mío- Esperando que Max beba primero.

El lobo lo toma y voltea el vaso en una caja. Giovanny sonriendo hace lo mismo, ambos terminando con un apretón de manos.

-Ellos están mal… lo único que manda es el poder y yo obtendré mucho- Sus venas se remarcaban en su frente y sus ojos.

-Claro que si- Con su brazo izquierdo detrás de su espalda.

El lobo se apartaría del saludo, mostrando un rostro de determinación. Y decisión. Giovanny por su parte, miraría relamiéndose los labios sintiendo el sabor del rencor y odio en el aire.

En otro lugar, a varios kilómetros de ahí. En un gran árbol rodeado de 7 más a los lados. Formando un circulo conectado por puentes gigantescos hechos de ramas. Con un toque del anciano al suelo, la música se detendría y el silencio reinaría. Alex iniciaba su pelea.

Ronda 1:

El simio miraría atento al siguiente movimiento de Alex. Girando alrededor midiendo a su contrincante. Alex le imitaría, moviéndose de un lado al otro por unos momentos.

El sudor recorría su cuerpo y la adrenalina evitaba que sus músculos dolieran por ahora. El gorila miro a Alex lanzando un fuerte bramido. El golpe se reanudaría. Esto comenzaba ahora.

El gran gorila se abalanzaba contra Alex, golpeando frenéticamente. El lobo activando su habilidad puesto que pese a su enorme tamaño era increíblemente rápido. Alex esquivaría a duras penas, puesto que, aunque sabe a dónde golpeara, su cuerpo no sería igual de rápido.

Sintiendo los enormes puños cortando el aire y rosando su cuerpo cada vez que golpea. Alex lograría esquivarlo, deslizándose entre sus piernas, reincorporándose nuevamente, golpearía con toda su fuerza el costado derecho desde su espalda.

El gorila sentiría el dolor, aunque leve. Alex ahora preocupado por hacerlo enojar, volvería a activar su habilidad, esquivando lo que puede hasta que lo que sintió como un golpe en su nuca lo detendría. Recibiendo un golpe a medias, pero, aun así, dejándolo completamente aturdido.

Alex miraría la sangre caer de su nariz mientras siente el dolor. Miraría los demás golpes del gorila, ir hacia él. Intentando activar su habilidad nuevamente, esquivaría un par y nuevamente, recibiría el ultimo de lleno. Volando a la pared.

Alex uso este momento para pensar en lo que le pasaba. Mientras se limpiaba la sangre de la boca. El gorila reía y alentaba al público.

-Creo que llegue al límite de mi habilidad… Esto será imposible…- Apretando su puño con enojo. –Si la fuerza no me sirve… usare mi cabeza- Escupiendo al suelo.

El gorila con un gruñido se reiría sarcásticamente:

- ¿Esto es todo lo que tienes, cachorro? No eres digno de mi fuerza- El público festejaba a su guerrero. –No eres el elegido ni nadie digno de estar aquí- Dándose la vuelta festejando su “Victoria”

Love this story? Find the genuine version on the author's preferred platform and support their work!

Ronda 2:

Alex con la vista en el suelo, sonriendo tomaría una liana, observando el lugar intentaría activar su habilidad para conseguir pensar en una estrategia. Sin éxito, miraría las gradas y las demás lianas en el suelo. Con rapidez idearía algo para atrapar o al menos. Conseguir ventaja.

Intentando activar su habilidad una vez más, escucharía los pasos del gorila hacia él. Respirando tratando de tranquilizarse tomaría la liana entre sus manos. El anciano sentiría el combate, la determinación y valentía del Lobo Blanco llegaban hasta donde él estaba. El miedo se olía en el aire junto a la sangre. Al abrir los ojos, Alex se dispondría a atacar.

Alex esquivaría con calma los golpes, aunque sentiría terror, confiaría en sus habilidades, sintiendo cerca el golpe que tendría que darle de lleno, atajando el golpe agachándose al momento, atando el pie del gorila con la liana. Avanzando el combate, Alex esquivaba recibiendo algunos golpes, pero enredando al enorme gorila cada vez más sin que este se diera cuenta. Corriendo de lado a lado.

El gorila arto, empujaría a Alex contra el muro de una tacleada desde la mitad de la arena, el gorila viendo su oportunidad se lanzaría con otra carga, sintiendo algo que le detenía de golpe, cayendo de cara contra el suelo. Alex aprovecho esto moviéndose rápidamente, mientras su enemigo caía, le propino una patada con ambas piernas.

El gorila saldría volando al otro lado. Alex caería de espalda, girando e intentando ponerse de pie, pero sus piernas estaban adoloridas. La multitud se callaría por un momento. Alex logro hacer que su miembro más fuerte mordiera el suelo por primera vez. Pero eso no sería suficiente para derrotarlo.

Una nube empezaría a envolver nuevamente el lugar, un rugido enojado se escucharía, Alex miraría al gorila acercarse, al momento de intentar golpearlo, Alex desaparecería entre la niebla. El gorila golpearía a todos lados intentando darle.

Alex aprovecharía tomando trozos de lianas mientras el gorila está confundido, creando un mazo arrojadizo, empezó a golpear al gorila con este, golpe que daba, golpe que era regresado, pero sin éxito. Solo se escuchaba el silbar de su arma improvisada.

El gorila molesto, tomaría el arma arrastrando a Alex hacia él. El lobo viéndose en problemas, golpearía repentinamente con golpes rectos a la cara del gorila. Logrando aturdirlo, metiendo una patada en su mandíbula. Alex sentiría sus manos entumecidas, sin perder más tiempo y con dolor, volvería a golpear con los puños, el gorila atraparía su mano derecha y luego la izquierda. Alex al verse atrapado, se columpiaría en estas, pateando su rostro con un movimiento de su torso.

Ronda 3:

Intentando golpear nuevamente, el gorila chocaría los puños con un gran golpe que resonaría entre el silencio que se creó nadie sabe cuándo. El puño de Alex se fracturo en un momento. Tomando su mano con dolor golpeo con la otra. Con el mismo resultado. El gorila golpeo nuevamente, Alex se cubriría con sus brazos en X.

Evitando el golpe en su cuerpo, ya no sentiría los brazos. El simio con un golpe más potente, pues su puño se volvió más grande, Alex mirando su fin respondería. Un gong sonaría deteniendo la pelea.

La niebla se iría con una ráfaga de viento que rompía el silencio con su silbido. Alex logro parar el golpe del anima, terminando de romper su puño en el proceso.

El gorila le miraría realmente sorprendido pues ese golpe logro lastimarle la mano bastante. El lobo caería al suelo rendido. Los primates susurrarían y el anciano con un golpe de su bastón le haría entrega de una especie de semilla. Hablando en un lenguaje de señas “Rustico” pero entendible.

- “Tu demostrar ser fuerte”- El simio le pediría al gorila ayudarle. –“Tu ganar semilla de la vida”- Un simio se acercaría con un plato y en este una semilla de color verde claro. –“Tómala y curar heridas profundas, pero advertirte. Ser demasiado doloroso”- El anciano esperaría a la respuesta de Alex

El joven lobo intentaría hacer una reverencia, pero sintiendo su cuerpo molido, no solo por la pelea, siente que se rompió un par de costillas durante el choque, pues el recibió el impacto de lleno. Alex tomaría la semilla y al momento de tragarla, sentiría como si una planta se alojara en su cuerpo. Expandiendo sus raíces alojándose dentro de él.

- “Soportar dolor y tendrás una regeneración milagrosa, a cambio de un dolor indescriptible”- Mandando a los simios a tomarlo de su cuerpo –“Un precio a pagar por ser más fuerte”- Alex miraría aterrado las últimas palabras del anciano.

Antes de caer al suelo sin poder moverse. Sintiendo como esta cosa se entrelazaba con sus huesos y músculos. Alex fisiqueara podría gritar por la toma de la planta a su cuerpo. Sintiéndose casi morir.

Segundos, minutos o horas. Alex no sabía cuánto tiempo pasaba con ese enorme dolor. Sufriendo en silencio, hasta que sintió como llegaba a su cerebro. Al momento dejo de sentir dolor. Se sentía renovado. Y con mucha más fuerza, pero su cuerpo era más pesado que antes, de hecho, parece haber crecido unos 10 centímetros.

Intentando ponerse de pie, seria elogiado por el anciano. Hablando con mucha honestidad.

- “Semilla ser dada a guerreros más fuerte. No importar especie”- Señalando al gorila. –“No muchos conseguirlo, pero si tu conseguirlo. Ser mucho más grande, fuerte y listo”- Señalando al gorila. –“Medicina tardar años en crecer y solo aceptar a quienes, destinados a ella, nosotros esperar a gran Lobo Blanco”- Otros simios llevaban un tapiz enorme bastante viejo.

Esta era desenvuelta en el piso con mucho cuidado, Alex miraba atónito la pintura. En esta había un Lobo Blanco de ojos dorados encendidos como dos linternas alumbrando una parte del dibujo, con una armadura plateada y muchos animas de distintas especies detrás de él, mientras que, del otro lado, un ser de oscuridad con una armadura negra y roja. Con ojos rojos como el mismo fuego del infierno, con un sequito de “Seres” del mismo color. Ambos luchando frente a frente, debajo de ellos, cenizas y escombros.

En un idioma desconocido para Alex, había mas de la profecía, pero escrita.

El gorila se presentaría como “Goliat” el jefe de guardia. Alex se daría cuenta que es el mismo que lo vigilaba anoche. Goliat hablaría con Alex de la profecía.

-Nuestra tribu estuvo en contacto con un reino olvidado, ellos tenían “Magia” avanzada como la que tenías en tu muñeca- Tomando de su armadura el reloj de Alex. –Ellos lograron ver el “Fin de la galaxia”- Entregando el reloj al lobo.

- “El Fin de la Galaxia” ¿Y esto que tiene que ver conmigo? - Alex se colocaría su reloj incrédulo a las palabras.

-La profecía dice: “En una era de conflictos, la luz dorada del ultimo de su linaje saldrá de entre las sombras. Un ser creado únicamente para luchar y ser el gran líder que se necesitara el “Elegido”- Goliat caminaría entre el tapiz, con Alex siguiéndolo atentamente. –“Aquellos con sed de poder se interpondrán a su paso, pero con valentía y astucia serian derrotados. En un último intento de preservar su poder entrarían en una última guerra con él. El “Elegido” tomara a las distintas razas bajo su mando para hacer frente a un peor mal”- Goliat miraría a Alex, recitando esta última parte de memoria. –“La galaxia ardera y de sus restos, saldrá un nuevo mañana con un alto costo. La vida del gran Lobo a cambio de la paz”- Goliat miraría a Alex.

El lobo atónito miraría el dibujo, ¿Era el quien sale en este retrato? ¿Creado para gobernar? La mente de Alex se abrumaba de preguntas. Hasta que un leve golpe en el suelo le sacaría de sus pensamientos, el anciano le volvía a hablar.

- “Saber que galaxia estar en problemas, pero saber que haber una luz dorada en esta oscuridad”- Bajando con cuidado usando su bastón siendo cargado por Goliat. - “Nosotros enseñarte arte antigua para fortalecerte y tu…”- Tomando la cara de Alex mientras sonríe alegremente. –“Tu ayudar a mi pueblo en esta guerra. Nosotros ser pacíficos, aunque saber luchar, pero quedar pocos de nosotros…”- Mostrando con la palma de su mano que, aunque son bastantes, aún queda mucho espacio para ellos en ese lugar. –“Nosotros ser gran tribu antes… No tener problemas con compartir, pero no querer luchar, no soportar más muerte”- Soltando lágrimas.

-Ustedes, aunque bruscos, fueron amables. Tenían miedo, yo lo tendría...- Alex le limpiaría la cara al anciano y miraría a los primates con una sonrisa. –Conozco a alguien muy poderoso, así que hare que ustedes estén bien… terminare esta guerra con mi equipo y ustedes vivirán en paz con los colonos. Tienen mi palabra… Porque se lo que es perder un hogar. Mis padres lucharon para dármelo todo. No dejaré que nadie les arrebate lo que es suyo- Ofreciendo su mano al gorila con el que lucho antes.

Este le abrazaría y todos celebrarían haciendo una gran fiesta. Alex miraría al horizonte, pensando que aún está el cañón y si quiere avanzar, tendrá que conseguir toda la ayuda posible.

-Señor… Anciano… Jefe… Maestro- inclinándose ante el anciano. –No puedo quedarme aquí mucho tiempo, por ahora… mi campamento está en peligro constante, puedo hablar con el líder y conseguir que haya más soldados buenos como yo cuidándolos…- El anciano miraría a Alex algo incrédulo. –Sé que suena a mucho, pero prefiero que la comida de aquí se les dé más a ellos, que la necesitan, yo negociare y regresare con ustedes a entrenar. Pero enserio, necesitamos establecer la zona antes de poder yo hacer algo mas –Alex se inclinaría.

El anciano le alzaría, pidiendo que no lo haga más, puesto que ahora es un guerrero.

- “Tu tener ayuda y nosotros protección”- El anciano le daría comida a Alex. –“Tener comida y zonas para ayudar, pero ahora tu entrenar unos 2 meses, porque cuerpo tener que acostumbrarse o haber problemas de salud”- El anciano comería de un plato. –“No te preocupes, llegará un tiempo. Ten arma tuya aquí, así que no estará sin protección”- Dándole un fruto a Alex. –“Descansar y comer. Mañana entrenar y después irte”- El anciano comería sonriendo a Alex.

El joven lobo, aunque preocupado, confiaría en ellos, disfrutando agradecido por la comida que estaba muy buena.

-Mañana enviare a mis mejores guerreros a recuperar sus suministros- Alex le miraría asombrado. –Nosotros vimos caer tu nave. Así que sabemos dónde está, pero tu tener que ser más fuerte para afrontar peligros en selva- Le daría un poco de vino en un recipiente. –Les daremos sus cosas y comida cada semana, mientras tu preocúpate en entrenar- Soltando una gran carcajada.

Alex sonriendo lo tomaría y felices festejarían esta gran alianza.

Regresando al campamento. Sus compañeros se enfrentaban a problemas cada vez mayores, con patrullas más frecuentes y faltas de suministros. Aun sin abandonar la esperanza de encontrar a su amigo. Steven al hacer guardia, miraría una zona de la selva, guiado por ruidos, observaría comida y sus suministros de la nave. Regresando con estos hacia el campamento feliz.

Un par de Simios le mirarían entre los árboles, Steven percatándose de esto, voltearía observando 2 sombras alejarse a toda velocidad. Sabía que no lo hacían porque sí. Que su amigo estaba detrás de esto. Que Alex no los había abandonado.