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Capítulo 5: El inicio de una gran aventura.

Y volvemos después de un día.

‘Con un ultra capítulo. ¿Verdad?’

Podría decirse, en términos narrativos sería el inicio del primer arco, que yo título como la búsqueda del Yeti de rango A o también la búsqueda del Gran Yeti; elijan el que más les guste.

El viaje no fue para nada silencioso; lamentablemente porque el 90% fue sufrimiento para este pobre vino, pobre porque no tengo ni una moneda de cobre bajo mi nombre. ¡Ha ha ha! quien diga que no es gracioso lo congelo.

Si alguien se pregunta porque sufrí mucho, solo voy a decir que es un estúpido. ¿Cómo no sufriría siendo la tercera rueda?

Fue de lo peor, pero no continuare con esto, volvemos a la trama.

‘Fueron unas buenas 100 palabras’

Callate. Cuando estábamos cerca de llegar la mamasita me dirigió la palabra por primera vez desde hace horas.

“Estamos para llegar, necesitas algo de información antes de llegar porque no es tu típico lugar, hay muchas reglas, la primera es que solo puedes cazar un animal cada 10 años, segundo no está permitido herir a otro animal más que cazado, hay otras con plantas pero solo importa la cual dice no puedes dañarlas” Esas fueron sus palabras sin ninguna cosa extra o algo menos.

“¿Es solo eso o hay algo más?” Al poco tiempo con letra llena de elegancia le escribí.

“Si que hay más, encontrar los yetis es un problema, y más aún el de rango A, preparate porque estaremos unos buenos días allí” El gran Dragón de bronce me dijo mientras volaba.

¿Te preguntarás cómo vio lo que escribí si estaba abajo? No se la respuesta, pregúntale a él pero seguramente sea algún tipo de magia, tal vez magia de ojos o algo así. En cuanto a cómo hice que la ilusión se mantuviera con nosotros fue moviendola, fue fácil aprovechando la inercia que generó el arrogante.

“Soy un vino, no tengo muchos problemas en estar en una montaña helada por días. ¿Cuál sería la diferencia? Ninguna” Con rapidez y elegancia le escribí transmitiendo totalmente mi orgullo y desdén, pocas personas pueden decir lo mismo que yo.

‘Yo puedo así que cállate, mira: Soy un vino, no tengo muchos problemas en estar en una montaña helada por días. ¿Cuál sería la diferencia? Ninguna’

¡Sos un estúpido!

“Aparte de lo que te dijimos anteriormente tienes que tener en cuenta esto; el terreno es una mierda, si, hay plantas exóticas que no existe en ningún otro lugar pero el 99,9% de las veces son pinos, hay muchas cuevas y la tierra está llena de baches y rocas, para peor está cubierto de nieve así que ni puedes ver donde caminas” El dragón me dijo, juro que no se porque decían tantas tonterías, y se los dije.

“¿Por qué me dicen estas cosas? Entiendo lo de los animales, pero que mierda con explicarme el terreno, ni que me pudiera moverme” De inmediato me queje de tanta tontería.

“Para encontrar algo primero debes conocerlo lo mejor posible, y para eso deberías conocer cultura, historia, geografía de su área cotidiana, biología, etc.

Ahora lo importante, según mitos y leyendas los yetis están guardando un lugar sagrado donde con solo respirar tu cuerpo se vuelve más fuerte, pero eso es una tontería yo ya lo hubiera sentido, tal vez si exista un lugar sagrado pero no es tan espectacular, encontrar ese lugar es la mejor apuesta que tenemos” La mamasita con elegancia me dice información importante.

“Entendido echare un vistazo si encuentro algo que diga lugar sagrado” Aunque le dije eso la verdad en ese momento no me importo para nada, pensaba como un buen perezoso que se encargaran de todo, y así actué por bastante tiempo.

“Aja... Bueno ya llegamos” Tras la palabras de Sita dio inicio a que te pudiera dar una descripción.

Frente a mi había una montaña tan grande que me pregunto como la habrán escondido, pero de inmediato vino la respuesta, pues magia; sorprendiéndome la montaña desde lejos se veía totalmente blanca como si no existiera otro color en el mundo... o tenía algún tipo de daltonismo.

Una vez que estuve más cerca pude ver que esta lleno de cuevas, pero lleno y lleno como comparación hay tantas cuevas como agujeros en un queso.

“A bajarse que la aventura se hace a pie” Con lo dicho por el dragón la mamasita se bajo conmigo.

“¡A la aventura!” Con emoción escribí.

“¡A la aventura!” Ya ahora que no estamos arriba de el vuelve a su forma humana, y con entusiasmo me levanta para irnos a la montaña...

'¿Entusiasmo? ¿Ese tipo?'

Ups me descubriste, eso me lo invente, quien dijo eso fue Sita también ella me levanto.

Ahora que estoy a metros de la montaña puedo ver de inmediato que tenían razón, hay tantos pinos que parece como si fuera arena en un desierto.

Estuvimos caminando y por mucho tiempo lo único que veía era nieve y pinos cubiertos de nieves, en cuanto al terreno irregular y yo que se que más, no tengo ni idea, los que se enfrentaron a esos problemas no fui yo.

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El único sonido que escuche por minutos fue el viento moviendo las hojas del pino, pero fue por poco tiempo, una vez que nos adentramos aún más, sonidos bestiales desconocidos para mi empezaron a vibrar en mi líquido. ¡Porque no tengo orejas!

‘Volvió con los chistes tontos’

Tu cállate, luego de tanto tiempo sin decir nada vuelves para decir mierda.

‘Pues quita el relleno y ve a por lo interesante. ¿Ves lo qué yo veo? ¿Ves ese lector que se está yendo? Porque yo si’

Ah, bien regreso sin relleno.

Luego de unos minutos de caminata y charla ociosa nos encontramos a un animal.

“Shh, este gran armiduresi tiene un muy buen oído, si nos encuentra tendremos que huir porque este animal es muy malhumorado una vez que lo molestemos nos perseguirá sin fin alguno y con sus técnicas tan destructivas... será un problema por las reglas ¿Me escucharon?” Y esa pregunta lo arruino todo.

“¡Raaaa!” El rugido del gran armiduresi nos abrió paso a la huida. ¿Quieren una leve descripción de su apariencia? ¿En esta dimensión hay armadillos?

‘Si’

Bueno imaginatelo pero del tamaño de un oso y su color mayormente blanco, en cuanto a la cola era más pequeña pero tiene pinchos retraible.

“¡Quien no huya es gey!” Y con estas palabras escritas por mi, ambos corrieron a gran velocidad; pero los pinos los obstruía bastante haciendo que al final no pudieran ir tan rápido como deberían, ah, de tanta lentitud el gran armiduresi nos pisaba los talones.

Saben, Sita es muy astuta, eso lo descubrí en esa huida; en un bosque cuando huyes de un animal unas de las cosas más importante es asegurar que solo te persigan uno y no más.

Ella supo ese concepto a la perfección y se aseguro de que eso no pasara, cada vez que se veía un animal ella cambiaba de dirección, y si uno se atrevía a venir hacia nosotros, no se que pasaría porque ningún animal era tan estúpido.

Tras un minuto de escapar me di cuenta de algo.

“Si seguimos así va a demorar mucho tiempo, solo parará cuando no pueda más. ¿Y si vamos por los arboles? ¿O en alguna cueva?” Con palabras y letras propuse, hijo de fruta me lo cambiaste, y ahora me lo cambias de nuevo.

‘Callate, repetiste mucho’

Tu callate, arruinando lo que digo.

‘Ese serás tu, repetiste dos palabras’

Ya no hablare contigo interrumpidor.

‘Pues no hables’

“Haber si funciona” Dicho esto da un buen salto y se para en las copas de los pinos, vaya equilibro que tiene, miren que los pinos son puntiagudos y ella iba de punta a punta, nunca se cayo, todavía me sorprende, más aun cuando paso lo siguiente.

Yo nunca podría hacerlo... porque soy un vino.

‘Vaya chiste de mierda’

*Bam* *Bang* Y no funciono tan bien como pensábamos, el gran armiduresi como el buen desgraciado que es no se rindió y empezó a embestir los pinos buscando que se cayera.

“Fue una mala idea. ¡Miren allá una cueva!” El dragón tras pasar un poco tiempo en que el gran armiduresi siguió embistiendo pinos el ve una cueva y de inmediato nos dirigimos hacia allá con la esperanza de que la entrada sea más chica que el gran armiduresi.

“Dale, dale, más rápido” De la única manera que podía los anime dando así mi apoyo, y quien piense en la magia de ilusión yo te diré una cosa, tengo que vengarme, los hijos de fruta me hicieron sufrir con tanta miel.

Y en cuanto a la magia de fuerza. ¿Crees que dos o tres puntitos a estos hijos de fruta le haría algo?

Tras unos segundos y muchos pinos derribados llegamos a la entrada de la cueva, por suerte era pequeña, tan pequeña que ambos tuvieron que gatear para entrar, problemas que yo no enfrento al ser un vino.

Por suerte para ellos cada vez era más grande, tras unos metros había suficiente espacio para que se paran.

“Ah, por fin nos libramos de ese gran armiduresi” Con un suspiro dice la mamasita.

“Si que si ¿? ¿Qué es esto?” Al ver algo raro en el piso escribí preguntando si era lo que me imaginaba.

“Huesos, o cadáveres mejor dicho, hay de humanos, elfos, enanos, ¿? vaya eso es de un dragón, no me lo esperaba, guau también hay de súcubos, ah, orcos y trols, tremenda colección” Con mucha sorpresa dice estoicamente el dragón. ¿Cómo lo dice sorprendido y estoico al mismo tiempo? Tendrías que verlo para entenderlo.

“¿C-cadaveres?” Para expresar mi incredubilidad le escribi eso con una C y un guión, explico para que no piensen que son delirios del autor.

“Si cadáveres, todos murieron a manos de los Yetis. ¿Ves estas abolladuras? Bueno fueron todas hechas por los garrotes de los Yetis, y antes que me digas pero pudieron haberlo hecho otro animal. ¿Quien de los dos a estudiado criminologia tu o yo?” Palabras llenas de neutralidad y sin emociones salieron en su boca.

“Yo no. ¿Pero tu si?” Sin creer que me encontrara con un Forense le escribí a modo de ironía.

¿Saben lo raros que son los forenses y más en la edad media? Yo no pero se que debe ser muy raro.

“Si, desde hace cuatrocientos años que soy forense” Con simplesa me lo dijo. ¿Acaso estaba aburrido y se hizo una carrera?

‘Yo digo que esa es la razón, si yo fuera inmortal o tuviera una vida muy larga por puro aburrimiento haría muchas profesiones, como cuarenta años siendo profesor, otros treinta siendo camionero, y así por siempre’

Ni puta idea, ahora callate que interrumpes.

“Continuamos o seguiremos viendo cadáveres, si lo vemos solo tenemos que pensar en su significado... estamos cada vez más cerca de los Yetis” Y estas palabras hicieron que rendauramos nuestros pasos.

“Eso es luz” Como si no lo vieran escribí con elegancia y siendo llamativo al usar letras doradas.

“Si estúpido” Y salimos de esta pequeña cueva llena de cadáveres.

Al salir por unos segundos no nos encontramos con nada, pero en poco tiempo escuchamos ruidos extraños, extraños para mi que por su cara parecía de lo más normal, esa fue la razón por la cual fui el primero en hablar... hablar otra cosa que no fuera palabras llenas de miel.

*Bam* *Bang* *Quchau* Ruidos de explosiones y golpes fue lo que escuche según ellos. ¿Pero que es eso de Quchau?

‘Bueno ese ultimo me lo invente yo’

“¿Qué es lo que está pasando par de melosos?” Con elegancia y curiosidad le escribi, ahora no interrumpas.

“Una batalla. ¿Qué más va a ser?” Como si fuera obvio dice Sita.

“Guau, podemos verla” Usando un emoji de perro llorando le escrbi; los ojos de perro llorando son irresistibles así que iba funcionar.

“No, si me dices una razón para verla te haré caso” Pocas palabras pero le dio un arrepentimiento muy grande.... ¡Como mi botella! A que pensabas malpensado.

“Porque uno puede ser un Yeti” Tras esto se quedaron callados y fuimos hacia donde se originaba los ruidos.

Poco tiempo necesitamos para darnos cuenta que no era un Yeti, ya que desde la distancia nos quedo en claro que no lo era, ya que los combatientes eran un Perezoso de Shasta y Megatherium Americanum.

Y lo que estaba frente a sus ojos era una batalla de colosales, en los míos no ya que no tengo ojos.

“No es un Yeti así que nos vamos” Pero antes de que se alejara mucho le escribi.

“No, recuerda tu promesa, je je” No supo como responder.

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‘Y se acabaron los 5 capítulos. ¿Como fue seguirás leyendolo? Te recomiendo que si porque esto solo va a mejorar’

‘Ya sabes, dale al follow, deja una reseña y haz todo lo que puedas para apoyar’

Bueno nos vemos otro día.