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XXXI - Incursión2

El nigromante que ahora se encontraba junto con su corcel y resguardado por su armadura de hueso empezó a mantener a raya a los insectos sin caer en desventaja, hasta que los guerreros finalmente pudieron acabar con los insectos del primer paso que se metian en su camino, yendo uno a ayudar al nigromante y el otro a las custodias, logrando acabar asi rapidamente con todos los insectos que los habían emboscado, incluso capturando algunos para que el nigromante pudiera mantener su energía al máximo.

Después acabar con la emboscada el grupo estaba confundido por a donde deberían ir o lo que harían, pues habían demasiados túneles desde ese lugar y todos estos estaban cerrados, podrían perder el tiempo si es que no escogen bien, permitiendo a la reina escapar, esta discusión terminó cuando el nigromante anunció que podría sentir levemente la vitalidad de las criaturas, y podría guiarlos al mayor foco de vida aparte de ellos en estas cuevas, que seguramente será la emitida por la reina insecto y su séquito.

El grupo estuvo de acuerdo y decidió proteger al nigromante mientras empezaba a concentrarse en sentir la vitalidad en los alrededores, mientras que ellos se dedicaban a tratar de recuperar algo de energía después de toda la lucha.

Después de un tiempo el nigromante salió de su modo de meditación y se dirigió a los cadáveres de los insectos del primer paso quitando las partes más duras de sus caparazones para incluirlos en su armadura, para finalmente indicarles a todos la dirección en la que se encontraba la mayor fuente de vitalidad en estos tunes aparte de ellos, sin embargo no sabía cuántos de ellos habría, ni sus niveles, por lo que deberían estar preparados para todo.

El nigromante les dio palas y picos de hueso a los caballeros para que despejen los tunes colapsados antes de poder atravesarlos y continuar con su búsqueda, esta vez con un ritmo más acelerado, pues el nigromante había visto que estos parecían querer escapar, y como tienen insectos voladores, cuando salgan de los túneles será muy difícil volver a atraparlos.

Después de un tiempo el nigromante les ordenó que se preparen, los insectos parecían haberse dividido en dos grupo uno de los cuales se dirige directamente a ellos mientras que el resto seguía avanzando esta vez a una velocidad aún mayor, esto no demoró mucho en notarse, pues los túneles empezaron a llenarse de insectos que se interponen en su paso, el nigromante se puso adelante del grupo y espejo una fuerte carga con su caballo apartando a los enemigos y acelerando el ritmo del grupo, mientras que los demás se encargaban de no verse rodeados y abrumados por los insectos.

Está furiosa carga duró hasta que finalmente vieron su objetivo la reina insecto, esta parecía una araña con una patas extremadamente cortas y estaba siendo llevada en la espalda de un extraño insecto gigante que parecía una retorcida combinación entre una mantis y un escarabajo, siendo lo peor de todo que estos dos insectos tenían un aura equivalente a la de seres del segundo paso, y no estaban solos, siguiendolos había cinco insectos que parecían hormigas gigantes, cada una del primer paso sirviendo como escolta.

El grupo maldijo al ver esta situación sin saber cómo tratar con esto realmente, pero ante la falta de tiempo para pensar, sus acciones tenían que ser muy rápidas.

—William, elige a dos de nosotros para enfrentarte al guardián del segundo paso, el resto detendrán a cualquier insecto que quiera acercarse e intervenir en la batalla.

—Las dos custodias vendrán conmigo.

Todos aceptaron estas palabras y dieron un último sprint de velocidad en el cual alcanzaron al grupo de la reina que escapaba, los insectos del primer pase les cerraron el paso, los dos guerreros envolvieron sus espadas con aura de batalla y abrieron una pequeña vacío que fue rápidamente agrandada por las jabalinas de las custodias, por donde pasaron todos excepto el nigromante, los insectos ignoraron a este último y fueron detrás de quienes habían atravesado su defensa, excepto uno, que fue atado por una runa mágica, y antes que pudiera romperla le cayeron varias más, haciéndole imposible liberarse en un corto tiempo, lo que fue aprovechado por el nigromante para inundar el túnel con su niebla verde la cual debilitaba a sus enemigos.

El insecto se segundo paso era muy rápido, y apenas podía ser seguido por el grupo debido a que cargaba a la reina, en ese momento Richard cálculo haberse alejado lo suficiente y se detuvo para detener a los cuatro insectos del primer paso que los perseguían y permitirle a su grupo una lucha más libre, desenvainando su espada e interceptando a los insectos que trataba de pasar a través de él.

Lamentablemente poco después de eso en el fondo del túnel se podía ver una tenue luz, que indicaba que la salida del túnel estaba cerca, las custodias para evitar que la alcanzara enfocaron una gran cantidad de energía en sus lanzas y las lanzaron hacia el insecto del segundo paso, estas lanzas se divirtieron en el aire y obligaron al gran insecto a detenerse y gritar para proteger a la reina con su cuerpo, esto finalmente les dio el tiempo de ponerse al día y empezar un enfrentamiento, pues si el insecto trataba de huir, dejaría vulnerable a la reina que cargaba en la espalda, pese a esto el insecto retrocedía poco a poco de espaldas acercándose lentamente a la salida de la cueva.

Los ataques a toda potencia de William apenas dejaban tenues marcas en el caparazón del insecto, provocando frustración en todos, pues pese a tener la sospecha de que realmente hubiera un guardián de segundo nivel, no deseaban tratar con uno realmente.

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Después de un tiempo de pelea el insectos se encontraba a escasos metros de la salida y apenas si tenía heridas evidentes en su duro exoesqueleto, al ver esta situación se dieron cuenta que debían arriesgarse o toda esta incursión seria en vano, William ordenó un ataque completo de cobertura a las custodias, quienes no dudaron en obedecerlo, cargando sus lanzas con casi toda la energía que tenían y manipulando su dirección, estas lanzas parecían moverse como criaturas vivas en el aire, tratando de pasar a través del insecto del segundo paso para clavarse en la reina insecto que se encontraba detrás de él, lo que obligó a este a extender sus apéndices frontales para detener las lanzas, las cuales dejaron profundas abolladuras en su armadura.

Esta oportunidad fue aprovechada por William quien se acercó frente al insecto gigante con un gran constructo rúnico en la mano presionando sobre el pecho del insecto, este brillo fuertemente y varias líneas rojas brillantes empezaron a cubrir el cuerpo del insecto gigante del segundo paso, sin embargo antes que estas líneas lo cubrieran por completo uno de sus apéndices frontales se movió rápidamente hacia William, Leyla que estaba detrás sacó un escudo redondo de su espalda y lo lanzó dividiéndose en tres, dos de los cuales pudieron interponerse en el camino del golpe del insecto, el primero formado por la energía de las custodias se rompió y desintegró, y el segundo fue aplastado contra el cuerpo de William quien después del golpe chocó contra el techo de la cueva antes de caer al suelo inconsciente, pero esto fue lo último que pudo hacer el insecto de segundo paso antes de ser completamente cubierto por las cuerdas rojas.

Mavia al ver al insecto de segundo paso completamente atado sacó la runa de ataque, hecha por Tomas capaz de dañar a seres del segundo rango, y después de dudar por un instante se decidió y apuntó a la cabeza del gran insecto, el constructo rúnico se activó y causó una fuerte explocion, que dejó un agujero agrietado en la cabeza del gran insecto, pero tambien envio volando a Mavia por el retroceso, Leyla al ver esto saltó, y realizó varias puñaladas rápidas justo donde había quedado el agujero, sintiendo como su lanza atravesaba algo muy parecido a la carne aunque con algo de dificultad.

En la distancia Mavia se estabilizó y después de ver lo que hizo su compañera fue en dirección de William, rompiendo instantáneamente un pergamino de recuperación mientras empezaba a controlar sus signos vitales, percibiendo un leve latido, esto fue suficiente para ella al menos por el momento y volvió a centrarse en el insecto que justo en ese momento se liberó de las restricciones, ambas custodias esperaban ver cómo se desplomaba, pero muy lejos de la realidad, el insecto empezó a retroceder lentamente, Mavia se maldijo por elegir mal el lugar en el que usar su única oportunidad que tenían, pero este pensamiento desapareció cuando se dio cuenta que no estaba atacando a Leyla que estaba frente a el, este parecía solo moverse de manera instintiva para poder sacar a la reina de la cueva.

—El guardian, ya no es un problema, debemos matar a la reina antes que salga del túnel.

Leyla también se dio cuenta de esta extrañeza y junto con las palabras de su líder pasó al lado del insecto gigante, solo para ser recibida con un rayo de energía, que apenas pudo bloquear con su lanza, Mavia también vio esto y fue recibida por el mismo ataque, este había sido lanzado por la reina, quien finalmente empezó a usar sus pequeñas patas para moverse de la espalda de su guardián, mientras mantenía a cierta distancia a las custodias con rayos que salían de sus ojos, sin embargo mientras las custodias se defendían de estos ataques se dieron cuenta que a pesar de estar en el segundo nivel, la fuerza de sus ataques apenas si eran del primero, las custodias intercambiaron miradas y se prepararon para intercambiar heridas por heridas, puede que las custodias no sean la profesión con más resistencia, pero dudaba que una reina insecto incapaz de moverse pudiera durar más que ellas dos.

Más profundo en los tuneles Richar estaba cubierto de su propia sangre en gran parte de su cuerpo, y apenas si tenía algunas partes de su armadura, frente a él habían dos hormigas monstruosas a las cuales les faltaban algunas patas, pero seguian moviendose tratando de pasar a través de de Richard, este sostenía su espada fuertemente mientras su aura de batalla parecía ondularse, en esta situación cualquier distracción por cualquiera de las padre podría resultar terrible, y esa distracción llegó como un relincho de dolor que provenía de aún más profundo en los tuneles, Richard cambió su mirada por un instante hacia el fondo con preocupación, pero este instante fue suficiente, las dos hormigas se abalanzaron sobre él, la situación era grave, sin más opción juntó casi toda su aura de batalla en su espada y balanceo un tajo a una de ellas partiéndola a la mitad, mientras que la otra trepó a su pecho con un salto tratando de morderle la cara, el impacto lo hizo caer de espalda perdiendo su espada, donde antes de ser mordido logró golpear a la hormiga, apartando su cabeza, esta pelea en el suelo parecía estar siendo ganada por Richard hasta que sintió que algo lo mordía, la hormiga que había partido a la mitad se había arrastrado hasta el y le había mordido la pierna, el sorpresivo dolor hizo que se descuidara y recibió una gran mordida en el hombro y también varias puñaladas de los apéndices de la hormiga que estaba sobre él, ignorando el dolor inbullo sus brazos en la energía de batalla que le quedaba y aplastó la cabeza de la hormiga, antes de liberarse de la que estaba mordiendo su pierna, recoger su espada y clavarsela para acabar con ella.

En ese momento empezó a sentirse débil debido a la fuerte pérdida de sangre por todas sus heridas, apenas llegando a activar el pergamino de recuperación, antes de caer inconsciente.

El nigromante estaba maldiciendo, el único insecto del primer paso se había escondido y con su último aliento dio un ataque suicida que rompió la pierna de su caballo, impidiendo su movimiento y obligándolos a resistir de frente al resto de insectos, además de que permitio que algunos insectos escaparan y fueran más adelante, esta situación era crítica, pasó toda su energía hacia su caballo quien empezó a deshacerse de su armadura volviéndola pequeñas flechas de hueso que eran lanzadas rápida e indiscriminadamente

sobre los insectos, solo dejó suficiente para crear una lanza y una espada para el nigromante quien las impregno de un liquido verde corrosivo antes de usarlas torpemente para acabar con todos los insectos restantes, no sin antes recibir una herida en la pierna por un ataque sorpresa, pese a al cual fue cojeando en dirección a Richard, pues algunos insectos había escapado a su dirección

Cuando lo hacía vio a la distancia a uno de ellos parado sobre el pecho del guerrero listo para morderle el cuello, el nigromante rápidamente inbullo la lanza con energías de muerte para controlarla y la lanzó, acabando con el insecto, empezó a buscar otros insectos amenazantes alrededor, y al no encontrarlos regreso a tratar de ayudar a su caballo.