-- No sé, si te fijaste mi niña, cuando salimos las bestias ya eran cachorros correteando por ahí –
--Si me fije, todos unos traviesos, gracias a mi querida Wicca, que lo hizo posible… las bestias desaparecieron—
--Gracias a todos, mi niña… todos fuimos importantes, tal cual nos enseñaste a convivir como una sola manada… superando nuestras diferencias, tenías razón, juntos somos más fuertes—
--Si mi Nana… ya no hay división en los lobos… ahora seremos más fuertes, porque hemos encontrado a los Lores… y se acerca la batalla final… que debió darse en el principio de los tiempos, cuando la rebelión de los ángeles… haber atrapado a los lores en esa tumba, solo corrió el tiempo… para que de todas formar enfrentar la batalla final –
--Tú crees mi niña, que hay una batalla final –
--Sí, estoy segura…. Pero esta vez los vencederos seremos las huestes del Ángel Surie, quienes venzan al poder de los tres, y lo enviaremos al mismo corazón del infierno, de donde nunca debieron salir—
--Mis betas deben reunir sus manadas, unirlas en una sola, incluyendo todas las especies de lobos, sin excepción, para la batalla final –
--¿También los licántropos? –
--Por supuesto, ellos le deben ese mal, a los arcontes, son como hombres lobos enfermos y los arcontes se la deben… así que también vendrán los licántropos y los. sangre de lobo –
En eso, llegan a la habitación de Loria, Emil y Mangú
--Mi reina, los lobos vigías, han seguido a los cazas Lobos a donde van, y han localizado más miembros de esta logia, que viven con un perfil bajo o incognitos, es como una fuerza de relevo, son muchos, que se hacen pasar por simples ciudadanos—
--Los tienen localizados –
--Si mi reina, hemos averiguado hasta el paradero de sus familias, en su mayoría son felinos, también hay un grupo que son como ratas—
--Bien… iremos por ellos… mis betas comenzaremos la cacería esta noche—
Durante las siguientes semanas, Loria y su manada, habían mermado los ejércitos de la logia, todos desaparecidos simplemente, tenían la ciudad poblada de seres infernales, que pensaron que estaban protegidos bajo el anonimato
El obispo enterado de las desapariciones, llama a una reunión de la logia con urgencia, pero ya no tiene eco en los altos jerarcas de la secta, cada uno entregado a su vida cotidiana, ya no tenían interés en hacer reuniones que terminaban en enfrentamientos entre los mismos arcontes
El Juez Breton, como presidente de la logia, trataba de mediar entre los demonios, llenos de los sentimientos más oscuros de unos contra otros, luego de las posiciones tan extremas entre Walter y el Cardenal
Este último todavía con los visos de ángel, que algún día tuvo, entregado a una religión que ya no profesa como la religión católica y a un Dios que traicionó, sin embargo, con posición opuesta a Walter, que es un asesino nato, sangre y muerte es su ley
Por otro lado, El Juez Breton luchaba entre Aramis y el Obispo, dos personajes enfrentados por la posibilidad que Loria, siendo la hija de Loredana fuera el ángel lobo de la profecía, convirtiéndose esa profecía en una amenaza real para la logia, que hasta el momento nada se habían podido descubrir al respecto
Los integrantes de la Logia convencidos que todos los lores se encontraban encerrados en una tumba angelical, para nunca más despertar, cerrada por un ex ángel y sellada por un hechicero extinto, donde los demonios no podían pisar, porque era dominio del creador, ignoraban por completo que aquellos q un día enterraron en vida, habían despertado
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Era la razón que la reina Loredana, dijera que la ciudad antigua, era su casa, aunque fue utilizada como su tumba, por la traición de uno de los suyos, el Camarlengo, personaje que se hacía pasar por un ministro de Dios
El juez Breton solo optó por desestimar los enfrentamientos entre los cazas lobos, mientras el tiempo pasaba a favor de los Lores, quienes se recuperaban poco a poco de su largo sueño
Una mañana despierta Loria para prepararse para asistir a la Universidad y ve sobre su peinadora los brazaletes y el collar con una nota angelical
--Déjame leer el mensaje – dice gloria a la nota
Las letras se mueven se revuelven y comienzan a organizar el párrafo del mensaje
--Querida hija, pronto estaremos juntas, el fin se aproxima, ya no necesito tus armas que te protegen, colócatelas todo el tiempo, el peligro te asecha… te ama tu madre –
Loria lanza la nota al fuego de la chimenea, y se coloca sus alhajas, ahora se siente más segura porque sus padres están con ella. Tanto tiempo que esperó para encontrar el lugar donde se encontraban sus padres, y ahora tampoco puede estar con ellos, mientras exista el poder de los tres
El obispo no se resigna a las repuestas evasivas del Juez Breton y decide salir a cazar, él mismo a Loria, en silencio, convencido que es el ángel lobo. La comienza a seguir mientras se encuentra en la Universidad con sus amigos humanos, la observa jugando pelota en los torneos, sus gustos, lo que come y cuando escucha clase
En la noche de luna llena también la espía, convencido que en algún momento se transformará en lobo, pero quien lo sorprende vigilando la casa es Caterina
--Señor Obispo, ¿Qué hace ahí escondido? Pase a la casa que le invito a tomar algo—
Sorprendido y apenado responde –No… yo no estaba escondido… admiraba la majestuosidad de esta mansión –
--La mansión de la reina Loredana, querrá decir, esta mansión fue construida por los ángeles ¿Lo sabía? — dice Caterina
--Si lo sabía, pero ahora es de Aramis, por ser el esposo de Loredana –, --Dígame Caterina…Loria ¿es la hija de Aramis con Loredana? ¿es cierto eso? – pregunta el Obispo
--Ya sé lo que está pensando… yo creía lo mismo que Ud.… que Loria era un lobo, pero no lo es… por años la he vigilado… pero ni su sangre tiene nada de lobo –
--Bueno me saluda a Aramis, después lo llamaré… ha sido un gusto charlar con Ud.—
Al llegar Aramis y enterarse de la visita del Obispo, se enojó
--Ese obispo nada tiene que hacer en esta casa… ese traidor todavía no sabe si es un ángel o un demonio –
--Él viene detrás de la niña Loria, señor— comenta Walter
--Así es… hermana no lo vuelvas a invitar a nuestra casa --
La vigilancia del obispo continuaba disimuladamente por sus empleados, también se turnaban para no ser descubiertos, pero la sagacidad de Terry los sobrepasa y se percata que están vigilando a Loria
--Amor hay unos hombres que te están siguiendo… ahora yo los seguiré a ellos—dice una nota que Terry le deja a Loria
El seguimiento continuó por varias semanas, ella se hacia la desentendida que no se daba cuenta, mientras la manada, seguían a cada uno que la vigilaba, para reunirse con la manada, debía tomar varios caminos para despistarlos. En el arroyo los lobos intercambiaban información
--Los que siguen a la reina, son hombres del obispo, pertenecen a los salesianos franciscanos, son jóvenes aspirantes a sacerdotes— dice uno de lobos
--Que ironía, futuros sacerdotes de Dios, guiados por un demonio del infierno – dice la Wicca
--De ahora en adelante, irán desapareciendo aquellos que se presten para servir al mal— comenta Loria
--Cada día que pasa los ejércitos de los cazas lobos, se van descubriendo, todos ellos infiltrados dentro de la sociedad civil – dice el Varón rojo
--Debemos continuar con nuestra estrategia y seguir invisibles ante ellos, mientras aminoramos ese ejército –
Ya habían pasado varios meses, Loria sentía el deseo de volver a la isla de aquella ciudad antigua, a encontrarse nuevamente con sus padres, pero no era conveniente, teniendo el Obispo tan cerca
De la misma forma Terry quería estar con su padre, aprender de él, a pesar que ahora tenía al igual que Loria a sus dos padres, se había criado sin ellos, pero sabía que debía quedarse al lado de su amada para protegerla de tanto mal que los rodeaba
Los salesianos enviados por el obispo, simplemente no regresaban al monasterio, esto hizo entender al Obispo, que debía ocuparse personalmente de seguir a Loria, para descubrirla, entendió que debía ser un ser especial, tan poderosa o más que su madre, a quien en su soledad recordaba con amor, ya que en algún momento estuvo enamorado de ella
¿Pero acaso un demonio puede enamorarse? es el amor que hace grande al creador, la reina Loredana tenía la virtud de enamorar a los hombres y a demonios, hasta el punto de enloquecerse, todos ellos lucharon contra sus sentimientos porque todos la querían para sí, solo el astuto de Aramis pensó que por lo menos había tenido una hija con ella y con eso se conformaba