"Los reptilianos intentaron hundir este mismo reino en el mar del segundo anillo hace ya varias décadas" -Me dijo Lumi, Ilustrándome con sus alas y estelas de luz mágica como había sucedido- "El rey tiene sus sospechas de que quieren volver a intentarlo justo antes de la contienda electoral de mañana".

"Intentamos buscarlos durante meses, pero esos bandidos no quieren salir de sus cuevas" -Dijo Saaden, limpiándose los dientes con un mondadientes.

"Yendo al punto, la idea es interceptarlos hoy por la noche, si quieren sabotear algo, tendrían que hacer preparativos para eso, es ahí donde atacaremos. Lumi ya se comunicó con el resto de los aventureros seleccionados, así que no estaremos solos, y viendo que tienes algo pendiente con uno de ellos, no veo por qué no pedirte ayuda". -Dijo Shizar

"Acepto, ¿Cuándo partimos?" -Dije yo a Shizar.

"Ahora mismo, no hay tiempo que perder. Vámonos"- Dijo Shizar levantándose de su silla, comenzando a caminar a la salida

"PIDO EL ASIENTO ACOLCHONADO DEL CARRUAJE"- Exclamó Saaden.

"JAJAJ ¿Quién mencionó un carruaje? No tenemos plata, nos la gastamos toda en nuevo equipamiento y aquí, prepara tus nalgas peludas, nos vamos en carreta.

"Si serás... ¡Te dije que esa armadura se salía del presupuesto!" -Dijo Saaden, saliendo de la taberna junto con Shizar.

"Será un gusto trabajar con ustedes" – Le dije yo a Lumi, extendiendo mi mano a modo de saludo.

Pero Lumi rechazó mi saludo, apartando mi mano de un ligero golpe con su "ala-mano" frunciendo el ceño mientras me miraba fijamente.

"Seré directa, no sé quién eres, ni de donde apareciste, y aunque nos ayudes, no me das buena espina; será mejor que no intentes nada raro, o te las veras conmigo".

"Me lo dicen seguido, que no importe mi presencia, simplemente quiero terminar con mi trabajo y que me paguen".

"Te estaré vigilando"

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- "Así fue como me fui con ellos, rumbo a la zona sur del Reino Central Bestia, donde tomaría lugar las elecciones de mañana, una ciudad llamada Sorean, que según me contaron ellos es una ciudad dedicada al ocio y diversión de los bestias, la ciudad que nunca duerme, donde las apuestas y el espectáculo son la ley. O te vuelves rico ahí o terminas perdiéndolo todo."

- "Mi ciudad favorita de todo el Reino y por mucho, eso sí es vivir la vida como se debe."- Me dijo Hunter, recostado sobre la grama.

- "¿Será porque siempre hacías trampa en ellos para ganar?"

- "Leyes de la naturaleza, Humano, el más vivo, se lleva el premio. Alguien como tú no podría entender. ¿Cómo crees que conseguí estas?". -Hunter me mostró las cadenas enrolladas en sus brazos.

- "¿Tus cadenas?"

- "Noooooo, Las granjas de humanos de la zona norte" -Me dijo Hunter sarcásticamente- "PUES CLARO QUE LAS CADENAS IMBÉCIL. Estas hermosuras costaron una fortuna, cadenas mágicas que son infinitamente largas y te estrujan como bestias cobra, permitiéndome acabar con todo aquel que sea tan cobarde de no acercarse".

- "Curioso, no recuerdo que hubiera sido así en nuestra pelea".

- "Sigue contando la historia de una vez... quieres".

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Después de unas horas de viaje, habíamos llegado a nuestro destino.

"Llegamos, asegúrense de no olvidar sus cosas, ¡este es el día en que los mamíferos bestia sale triunfantes!". -Dijo Shizar, bajándose de la carreta, entusiasmado - ¿Primera vez aquí "Slenkain"?".

"Sí, y se dice Spacetime, Nunca había visto una ciudad tan vacía".

"Eso solo es de día, de noche es cuando la cosa se pone buena, jeje" -Dijo Saaden, comiéndose unas bayas- "No has comido nada en todo el viaje, ten un par de estas".

"No gracias"-Le respondí- "No tengo hambre"

"Faltan aproximadamente tres horas para que anochezca, deberíamos prepararnos e ir a la arena" – Dijo Lumi, tomando una mochila llena de pergaminos.

"¿Arena?, a qué te refieres." – Le pregunté

"La monarquía aquí no funciona como en la mayoría de los reinos, aquí cada siete años se disputa una contienda electoral, entre los bestias para ver quien es el siguiente gobernante del Reino Central, puedes verlo como un torneo, combates uno a uno hasta que el último en pié enfrenta al heredero del trono por descendencia."-Me dijo Lumi

"Interesante, y supongo que piensan que la arena sería un buen lugar para sabotear"

"¡OIGAN!, ¡vengan ya!, ¡los otros aventureros ya están preparados!"- Exclamó Saaden, ayudando a cargar las armas y artilugios de Shizar.

"No nos estorbes"- Me dijo Lumi, rápidamente redirigiendo la palabra hacia Shizar – "¡Yendo!, ¡Solo contaba mis pergaminos!"

La arena de combate era enorme, pensándolo mejor, parecía más un coliseo con sus gigantescos graderíos, puertas masivas que llevan a sitios subterráneos donde los contendientes se preparaban, y una zona privada para el rey y el príncipe.

Caía la noche y los guerreros se habían ido a la zona privada para la nobleza a investigar y buscar rastros reptilianos, mientras que los hechiceros estaban usando su magia para buscar rastros de maná reptilianos, otros conjuraban hechizos poderosos para tenerlos listos en caso de ser atacados.

Mientras que a mí y los otros nos tocó vigilar, al no tener yo una cartilla de aventurero, no sabían de qué era yo capaz, así que me pusieron a la vigilancia, junto a otros aventureros de habilidades no tan útiles para el combate.

El silencio reinaba en la arena, esperamos y esperamos, pero nada se aparecía, muchos aventureros habían empezado a parlotear de sus aventuras con otros, incluso vi algunos ligues nocturnos entre ellos.

De repente, uno de los aventureros vigilantes divisó una silueta entre las sombras moviéndose rápidamente hacia la pared este de la arena, tres aventureros bajaron por los muros de la arena y le siguieron el paso a la silueta. Los hechiceros concentraron sus esfuerzos en intentar localizarlo con su magia.

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Pero el tiempo pasó y ellos no regresaron...

"No logro ver nada en mi visión" -Dijo un hechicero- "Tampoco yo" -Dijo otro-

Desde la distancia, Shizar nos gritó

"¡LUMI, SAADEN, "ESPENKTAIN"! ¡VENGAN CONMIGO! ¡LOS TRAERÉ DE VUELTA!

De un salto, Shizar se aventó del graderío hacia donde desaparecieron los otros 3 aventureros.

"Shizar, ESPERAME. Mi nombre no pasará a la historia si no voy contigo" – Gritó Saaden.

"Que hacen esos idiotas, llamaran la atención de lo que sea que fuese eso" -Dijo uno de los aventureros-

"A sus órdenes Shizar"- Dijo Lumi mientras levantaba vuelo con sus alas yendo donde él.

Bajé por la pared de la arena para poder encontrarme con mi grupo, parece que habían encontrado algo.

"Miren... es un túnel, seguramente los otros se fueron por aquí". -Dijo Shizar.

"¿Y qué esperamos? No creo que vayamos a encontrarlos si nos quedamos aquí". - Les dije. – "Estas huellas, no son de ninguno de ustedes, están frescas. Síganme, no pueden estar tan lejos"

Nos adentramos en el estrecho túnel, con confianza de encontrar a los bestias desaparecidos y muy probablemente a los reptilianos.

El viaje no fue muy cómodo, hay que decir, hubo partes del túnel inundadas, que Lumi tuvo que drenar el agua con su magia, si bien eso ayudaba, todos terminamos cubiertos de lodo.

Finalmente, después de tanto tiempo en el túnel, logramos salir sobre un pequeño camino de tierra, y lo que vimos después fue algo impresionante.

"¿Q-que es esto...?" "¡Es enorme!" "No puede ser..."-Dijeron mis compañeros en sucesión-

Resulta que, ellos habían estado bajo nuestros pies todo este tiempo. Los reptilianos habían construido una base de operaciones bajo la arena, una enorme cueva almacenando toda su artillería, habíamos llegado en una de las partes más altas de la cueva, la cueva era sostenida por pilares de barro endurecido, y emanaban cierta energía mágica.

En el centro de esta tenían un enorme cristal, de aquellos que llegaron con el meteoro que creo la cúpula, que utilizaban de fuente de poder para sus máquinas para seguir carcomiendo el suelo bajo el terreno bestia.

Ah... las últimas palabras que recuerdo de esta parte es...

"¡ATRÁPENLOS!"

Y todo se oscureció.

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- "Un segundo, ¿Qué?" -Dijo Hunter

- "Nos atraparon"- Le respondí

- "¿CÓMO NO SE DIERON CUENTA, ESTÁN CIEGOS, SORDOS O RETRASADOS?"

- "Dice el que nunca enfrentó a un reptiliano en su vida, son silenciosos y pueden estar boca abajo todo el tiempo, cuando llegamos, nos vieron inmediatamente y nos capturaron".

- "¿Eres idiota o te haces?, pudiste contra mi magnífico ser, ¿por qué no podrías con esas alimañas? Un espadazo y escapas".

- "El tonto más bien eres tú, de hecho, si me dejaba capturar por los reptilianos, ellos me llevarían con su líder y con suerte encontraría a Leqkyu".

- "Mhm... dale, pues continúa".

- "Más bien suficiente por hoy, necesitas descansar y esto te lo puedo seguir contando mañana en el camino".

Hunter se paró, y se acercó a mí

- "¡Te exijo que CONTINÚES! ¡Rata inmunda, animal rastrero!

Sin pensarlo dos veces, desenvaine mi espada y en un rápido movimiento tomé la espada del filo con mi mano derecha y le pegue con la empuñadura al cuello del bestia, dejándolo inconsciente.

-"Hmm... ese insulto... era para mí, para él, o para los bestias ratas... -Me dije a mí mismo- "Lamento, informarte que necesito mantenerte con vida hasta llegar a Origen, no puedo permitir que pase "aquello" de nuevo, no otra vez."

Aproveché lo que quedaba de la noche para inspeccionar mi brazalete, después de ingeniármelas ahí, y ver como estaba cableado pude hacer que entrara en el modo de recuperación, lamentablemente no pude hacer que funcionara del todo, y solo podía acceder a unas funciones, no tenía ninguna señal de los "Superiores" así que no podía recibir misiones ni tampoco saber cuanto tiempo me queda de vida. Pero podía acceder a la base de datos que tenía descargada, todos los planetas que he visitado están ahí. La brújula y los mapas funcionaban también, la localización local, por igual, una función de mini mapa que proyecta una vista superior del relieve y entidades a 5 kilómetros a la redonda, me quedé investigando y trabajando hasta el amanecer".

- "Eh—¿Dónde estoy? ¿EHHHHH?" – Exclamó Hunter al despertarse sorprendido-

- "Al fin despiertas Hunter, llevamos aproximadamente tres horas de camino, te aviso que ya sé dónde estamos exactamente".

- "¿DE VERAS? ¿CÓMO? E-Espera que haces cargándome..." -Dijo Hunter mientras se bajaba de mí-

- "Nunca despertabas y tuve que cargarte en mi hombro. Si queremos avanzar al norte tenemos que seguir" –

- "No olvides mi primera pregunta, Humano. Dijiste que sabes dónde estamos, anda dilo".

- "Estamos en Küpperniko, un planeta bi-estacionario, estamos en verano.

- "¿Bi- que, verano, estaciones?"

- "Ah, cierto, En Lydenfrost no hay estaciones. Explicándote en un lenguaje más simple, la mitad del año es calor, y la otra es frío. Existe un lado selvático tropical y otro desértico en verano, donde estamos ahora.

- "Creo entender... un poco"

- "Tenemos que llegar a algún refugio antes del invierno"

- "¿Y eso?"

- "Este lugar se inundará y el otro lado se elevará, la tierra se partirá y es probable que nos hundamos hasta el fondo del planeta en todo el caos"

Hunter se quedó pasmado, se congeló completamente con una cara de miedo terminal

- "Olvídate de eso, debe de faltar más de un mes para el cambio de estación. Es más, ahora que sé dónde estamos, conozco un lugar donde pasé antes. Ya se te pasará, te seguiré contando lo de los reptilianos, cachorrito".

- "¡¡¿¿¿CÓMO ME LLAMASTE!!!??"

-Y ya regresó..., bueno, prosiguiendo con la historia.

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Nos cargaron como sacos de papas, por todas las instalaciones, los demás estaban inconscientes por un somnífero y amarrados, poco podía escuchar dentro del saco, pero sabía que estaban trabajando en algo grande por los sonidos de maquinaria trabajando.

Nos llevaron a una sala cerrada, nos pusieron de rodillas y nos quitaron los sacos.

"¿Qué acaba de pasar?"," Nos atraparon, eso pasó", "¡CONSIDÉRENSE MUERTOS REPTILIANOS! -Dijeron Saaden, Lumi y Shizar en orden.

"Oigan, cálmense" -Dije yo. -

"Enviaron a cuatro más... Excelente. Veo que algunos de ustedes están despiertos ya, Excelente, excelente." - Dijo un bestia serpiente frente a mí, parecía una cobra, el bestia vestía de túnica y estaba sentado en un trono de madera- "Fue imprevisto que ustedes aparecieran aquí, pero no son nada más que un pequeño contratiempo, ¿No es cierto, maestro de obras?".

-Así es Kai, Así es, considérate afortunado de tenerme a mí, y mis invenciones. -Dijo Leqkyu

-Leqkyu tú nunca me has fallado hasta este momento. Te dejaré hacer los honores de ejecutarlos. -Dijo Kai

- "Iré a traerla, mi señor".

Mis compañeros estaban forcejeando como podían, tratándose de liberarse de sus ataduras. Mientras yo veía como traían algo que parecía una guillotina cuádruple.

-Ah, la guillotina, un clásico de clásicos, excelente, será un muy buen espectáculo que mostrar mañana por la mañana a los bestias cuando hundamos su preciado Reino en el mar" – Dijo Kai.

"¡No te saldrás con la tuya, los demás aventureros vendrán y te harán ceviche de serpiente, malnacida abominación!" - Dijo Shizar –

"Veremos si eso se cumple, querido bestia, estamos usando esa piedra para levantar una barrera igual que la cúpula que rodea todo Lydenfrost, ósea irrompible. Irrumpimos el flujo de la magia para ser indetectables, no hay nada que nos pueda parar ahora... Leqkyu, la guillotina. Ahora."

"A sus órdenes milord"

Amarrados, pusieron nuestros cuellos en línea con la hoja de la guillotina cuádruple, Shizar seguía intentando escapar de alguna manera, Lumi se había rendido ya, mientras que Saaden había quebrado en llanto.

"WAAAAAAAAAAAAAAAAA WAAAAAAAAAAAA NO QUIERO MORIIIIIIIIR NO ME MEREZCO ESTOOOOOOO" -gritaba Saaden.

"¿Primera vez?" – Le dije yo.

"¿¡COMO QUE PRIMERA VEEEEEEZ?! ¡NOS VAN A MATAAAAAR!

Kai se veía complacido con su panorama, viendo a la última esperanza de los bestias caer frente a sus ojos, ya podía el imaginarse nuestras cabezas rodando por el suelo de barro, dejando nuestros cuerpos sin vida alguna. O eso creía.

"Estuvo bueno el espectáculo caballero, pero ¿Creo que ya es hora de que terminemos con esto no creen? – Le dije a Kai

"Si... es hora de que mueran"

"No, lo decía por mí de hecho"

De un tirón rompí las ataduras de mis manos y con mi cuello partí el trozo de madera que me tenía fijo a la guillotina, tomé mi espada y de un salto corté la parte superior de la guillotina en pedacitos, liberando a mis compañeros en el proceso.

"¡GUARDIAS A ELLOS!" -Dio la orden Kai y sus lacayos nos rodearon con sus lanzas

"¿Sapeislait? ¿Qué... es esto?" -dijo Shizar asombrado.

"¡No pregunten y peleen, que estamos rodeados! Y por tercera vez, se dice ¡Spacetime!" -le dije yo a Shizar y los otros dos.

"Creo que es hora... la hora de usarlo" – Dijo Shizar-

"No, Shizar no, no es tiempo de "jugar", olvídate de ese objeto mágico AHORA"- Le gritó Lumi a Shizar.

"¡¿E-Espera de que hablan?! -Dijo Saaden

"No veo otra manera de salir de esto Lumi"-Dijo Shizar, sacando un objeto en forma de reloj de arena con un dado de veinte caras en su interior – "¡Que comience el juego! Malditas Lagartijas"

Shizar presionó el reloj de arena de sus extremos, y un brillo cegador se desprendió de él... tanto que apenas podía ver frente a mi nariz... hasta que el brillo paró y...