Jhon continuó su avance y salió del bosque, llegando a los alrededores de una aldea parcialmente destrozada. Había algunos aldeanos tratando de reconstruir sus hogares, pero lo que más llamó la atención de Jhon fue una chica llamada Sofía. Ella tenía la habilidad única de hablar con seres que no hablaban el idioma humano, como Jhon.

Jhon, acostumbrado a matar humanos porque no podía comunicarse con ellos, se preparó para atacarla. Sin embargo, Sofía, asustada, le pidió que no lo hiciera. Jhon se detuvo, intrigado por su habilidad y decidió hablar con ella. Preguntó por la aldea y por qué estaba en ese estado.

Sofía le explicó que la aldea estaba alejada de la capital, lo que la hacía un blanco fácil para los bandidos. Además, una reciente hambruna había afectado a todo el país, intensificando los ataques de los bandidos en busca de recursos. La aldea había sido atacada varias veces, y muchos de los aldeanos habían perdido sus hogares y seres queridos.

Sofía le contó que había crecido en la aldea y que siempre había tenido la habilidad de comunicarse con seres no humanos. Esta habilidad la había ayudado a entender y proteger a los animales del bosque, pero nunca había imaginado que le salvaría la vida al poder comunicarse con Jhon. Ella había estado tratando de ayudar a los aldeanos a reconstruir sus vidas, pero la situación era desesperada.

Jhon, al escuchar la historia de Sofía y la aldea, sintió una conexión con ella. Decidió que no podía dejar pasar la oportunidad de seguir hablando con alguien que lo entendiera. Le dijo a Sofía que la ayudaría con los bandidos. Sofía, aunque agradecida, miró a Jhon con escepticismo. “Eres tan pequeño y pareces débil,” pensó, dudando de su capacidad para enfrentar a los bandidos.

Jhon, decidido a demostrar su valía, le aseguró a Sofía que sus habilidades eran más poderosas de lo que parecían. Le explicó cómo había derrotado a enemigos mucho más grandes y fuertes que él, utilizando su inteligencia y habilidades especiales. Sofía, aunque aún dudosa, aceptó la ayuda de Jhon, esperando que pudiera hacer una diferencia.

Juntos, comenzaron a planear cómo enfrentar a los bandidos y proteger la aldea. Jhon sabía que esta era una oportunidad para demostrar su fuerza y ganar la confianza de Sofía y los aldeanos. Con su habilidad de “bola de fuego” y su nueva habilidad de usar el atributo agua, estaba listo para enfrentar cualquier desafío que se presentara.

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La historia de la aldea y Sofía le dio a Jhon una nueva perspectiva sobre su misión. No solo estaba luchando por su propia supervivencia y crecimiento, sino también por proteger a aquellos que no podían defenderse. Con esta nueva determinación, Jhon se preparó para la batalla, sabiendo que cada victoria lo acercaba más a su objetivo de convertirse en el escorpión más poderoso del bosque y, ahora, también en un protector de los inocentes.

Jhon pensó en una forma de vencer a los bandidos, pero como ellos eran ocho veces más grandes que él, debía enfrentarlos uno por uno. Sofía le informó que había un total de 10 bandidos: 1 en la entrada de la aldea, 5 en la casa del alcalde, 2 recorriendo el pueblo y 2 cuidando a los rehenes.

Decidido a emboscar a los bandidos, Jhon usó su nueva habilidad de “bola de veneno” para atacar a distancia al bandido de la entrada sin alertar a los demás. La bola de veneno impactó al bandido, quien cayó al suelo sin hacer ruido. Jhon aprovechó la oportunidad para deslizarse dentro de la aldea.

Una vez dentro, Jhon localizó a los bandidos que estaban cuidando a los rehenes. Usando su agilidad mejorada, se movió rápidamente y picó a uno de los bandidos, inyectándole su veneno letal. Antes de que el otro bandido pudiera reaccionar, Jhon lanzó una pequeña bola de veneno que lo impactó directamente, dejándolo incapacitado. Con estos tres bandidos eliminados, Jhon sintió una oleada de energía y una notificación apareció ante sus ojos: había subido al nivel 10.

“¿Evolucionar? ¿Cómo es eso?” pensó Jhon, intrigado. La ventana de valores le ofreció dos posibles evoluciones:

Escorpión Grande Negro: Crecería 20 centímetros, ganaría defensa y un poco de fuerza, pero perdería gran parte de su agilidad y sería considerablemente lento.

Escorpión Mediano Negro: Crecería 8 centímetros, ganaría velocidad, más puntos mágicos, un poco de fuerza y defensa, y sería mucho más ágil. Además, su veneno sería más peligroso.

Jhon, al ver estas opciones, eligió la segunda evolución. Sintió una oleada de energía mientras su cuerpo cambiaba. Ahora era más rápido, más fuerte y su veneno era más letal.

La transformación fue intensa. Jhon sintió cómo su cuerpo crecía y se fortalecía. Su exoesqueleto se volvió más resistente, y sus patas se alargaron, permitiéndole moverse con una velocidad impresionante. Su veneno se volvió más potente, capaz de incapacitar a sus enemigos con mayor rapidez.

Con su nueva forma, Jhon se sentía invencible. Decidió probar sus nuevas habilidades y se dirigió hacia la casa del alcalde, donde se encontraban cinco bandidos. Usando su velocidad mejorada, se movió sigilosamente y lanzó una bola de veneno a uno de los bandidos, quien cayó al suelo en cuestión de segundos. Los otros bandidos, sorprendidos, intentaron reaccionar, pero Jhon se movió con una agilidad asombrosa, picando a dos de ellos antes de que pudieran sacar sus armas.

Los dos bandidos restantes intentaron huir, pero Jhon los alcanzó rápidamente. Con una combinación de picaduras y bolas de veneno, los derrotó sin esfuerzo. La casa del alcalde estaba ahora libre de bandidos, y Jhon se sintió satisfecho con su victoria.

Sofía, quien había estado observando desde la distancia, se acercó a Jhon con una mezcla de asombro y gratitud. “No puedo creer lo que acabas de hacer,” dijo, impresionada. “Has salvado a nuestra aldea.”

Jhon, aunque cansado, se sintió orgulloso de su logro. Sabía que aún quedaban dos bandidos recorriendo el pueblo, pero con su nueva evolución, estaba seguro de que podría enfrentarlos sin problemas. Con una nueva determinación, Jhon se preparó para la siguiente fase de su misión,