Al abrir los ojos lo primero que observé fue aquella luna llena frente a mis ojos, cuya luz iluminaba todo el valle donde yo yacía.

-Mierda, eso realmente me dolio-

Alrededor mío había un gran agujero de aproximadamente diez metros de diámetro y tres de profundo, generado por el impacto de mi cuerpo en la tierra.

Se podía ver como un charco de sangre me rodeaba. Sentía un inmenso dolor en todo el cuerpo. Supongo que me habré roto algún que otro hueso, pero nada que un hechizo de curación intermedio no pueda curar momentáneamente.

- “Llama Sanadora” -

Supongo que esto bastará por ahora. Ahora viene lo interesante. Volví a mirar hacia el frente y me encontré con él, acercándose hacia mí a una velocidad sobrenatural, con el brillo de la luna de fondo.

Me siento extraño, esta sensación no me gustaba nada. ¿estoy triste? ¿deprimido? No lo entiendo. El simple hecho de observarlo dirigiéndose hasta aquí me hace querer renunciar a todo. Esto que siento, sí, es frustración, a pesar de todo el camino que recorre no puedo si quiera compararme, hay una gran diferencia de poder. Nunca creí en la posibilidad de cruzarme con un ser así, ni tampoco que existiese Siento las palpitaciones de mi corazón velozmente, no estoy seguro de que pueda sobrevivir, esto me supera en todo sentido, tengo miedo.

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Hay muchas cosas que no he podido hacer, hace mucho tiempo que no contacto con mis padres, quería ser reconocido como un gran aventurero como al abuelo, todavía no me he casado, quería formar una familia algún día, tener un hijo o dos. Asistir a esa maldita escuela, a la que nunca logré llegar.

- “Tormenta eléctrica” –

Mientras pensaba eso, él ya había lanzado su hechizo. Un inmenso rayo se acercaba velozmente hacia mí. Esa gran potencia y velocidad, quien sabe capaz solamente es un nivel imperial y ni se acerca al nivel celestial. El simple hecho de pensar así me deprime. Nunca logré ser nadie en esta vida y nunca lo lograré.

¡NO QUIERO MORIR! ¡NO QUIERO MORIR! ¡NO QUIERO MORIR!

¿Cuándo empezó a salir todo mal? ¿Cuándo fuimos con mi hermano hacia la escuela? ¿En el secuestro? ¿En la búsqueda? ¿Cuándo me uní a Joan? No encuentro ninguna respuesta a esta situación. Pero si hay algo que realmente me inquieta es ¿Por qué es él a quien tengo enfrente?

Mientras pensaba todo esto en busca de una respuesta, el rayo se acercaba cada vez más y más.

Es mi fin.