Me gustó tanto esta historia que no podía prestar atención en clase y dejar de leer. Así que, decidí traducirla (es la primera que hago algo así) para que se pudiese ampliar su radio de lectores. Si encontráis algún error, por favor, decidlo. Espero que no os decepcione.
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Tumbándose, le embargó la sensación de una cama cómoda y cálida, sonrió con confianza en sí mismo "Al fin, un merecido descanso...", pensó mientras se ponía de lado. Se sentía más somnoliento que nunca esa noche, a pesar de haber sido un día tranquilo, como si hubiese trabajado en un oficio muy exigente físicamente durante todo el día.
Era sábado y había pasado todo el día jugando a videojuegos, algo que le gustaba hacer cada vez que tenía tiempo. ¿Conoces ese tipo de persona? ¿Que prefiere ir a casa en lugar de ir a fiestas u horas felices en la empresa? (https://en.wikipedia.org/wiki/Happy_hour Básicamente, es una estrategia que usan algunas compañías para mejorar las relaciones entre trabajadores, y consiste en tomar algo, socializar, etc…). El tipo que daría fácilmente una excusa y correría a casa para quedarse a solas con sus pensamientos y juegos.
No es que fuera socialmente torpe ni nada, tenía amigos con los que había salido de vez en cuando, con algunas chicas también, pero a veces, si no la mayoría del tiempo, nada de eso le importaba, sólo necesitaba descansar y hacer lo que él quería hacer, recargar las pilas, si quieres llamarlo así.
Y ahora estaba allí, en su cama feliz ante en la idea de que tendría un día más para descansar, el domingo entero para jugar un poco más, tal vez incluso pedir una pizza para no tener que perder el tiempo cocinando.
Sintió como la sensación de adormecimiento se apoderaba de su cuerpo y cayó lentamente en un profundo sueño.
De repente, fue como si un interruptor se activara en su mente: estaba completamente despierto, todos sus sentidos se dispararon y sus ojos se abrieron de par en par. Para él, la sensación era que ni siquiera había pasado un minuto desde que cerró los ojos.
Entonces se dio cuenta, la cómoda cama era de repente extremadamente incómoda, como si estuviese colocado en la parte superior de una raíz muy dura de un árbol que surcaba su espalda con su forma dura e inconfundible.
Pero eso no podía ser posible, por lo que se movió para el otro lado forzándose a cerrar a sus ojos, tratando de obligarse a dormir.
Pronto se dio cuenta de que no podía, una sensación extraña tomó la voluntad de su propio cuerpo, y no pudo sentir sus sábanas, ni escuchar el ruido del aire acondicionado; pero aun así sentía cómo una fresca brisa le acariciaba las mejillas.
El miedo lo obligó a abrir los ojos una vez más, pero ahora más tranquilo, y comenzó a analizar su entorno.
Estaba oscuro, demasiado oscuro en realidad, no podía ver nada. ¿Dónde demonios estaban las luces LED de su ordenador, del módem y del despertador?... Pero no estaban por ningún lado "¿Un apagón?" pensó para sí mismo, tratando de llegar a su teléfono móvil junto a la cama.
El suave tacto de su móvil fue sustituido por una superficie rugosa que no reconoció. Tanteó un par de veces para dar sentido a lo que estaba notando "¿¡Un árbol!? ¿¡Cómo!?" gritó en su mente. Estaba confuso, pero ahora estaba seguro de que se encontraba de hecho sobre las raíces de un árbol; olía el aroma de la tierra, podía sentirla, y comenzó a mover su cuerpo. No podía verlo, pero intuía que el árbol era muy grande por la forma en la que notaba el tronco sobre su espalda.
Se sentó y trató de calmarse, pensando para sí mismo "Ponerme nervioso ahora no sirve de nada, necesito saber qué está pasando, necesito que mis ojos se acostumbren a la oscuridad para que pueda ver dónde diablos estoy".
Después de sentarse, perdió la noción del tiempo... sintió como si hubiesen pasado muchas horas, y por muchas veces que pidió ayuda... pero ni siquiera su eco se oía en la oscuridad.
La extraña sensación de quietud y el silencio eran las únicas cosas de las que pudo tener certeza esa noche.
Aun después de todo ese tiempo, sus ojos eran apenas capaces de discernir lo que estaba cerca de él. No había luna, ni sonido de coches, ni luces ... solo oscuridad.
Tratar de mirar a lo lejos era completamente inútil, ese maldito velo de oscuridad lo cubría todo como una manta gruesa.
Asustado y con los nervios de punta, no se atrevía a moverse de ese sitio. Lo único que podía hacer era concentrar todos sus sentidos en su entorno, la última cosa que necesitaba era ser atacado por un animal o un insecto peligroso.
Finalmente, la noche más larga de su vida mostró señales de terminar. A la distancia vio cómo, muy lentamente, la primera luz del amanecer comenzó a rasgar el velo de oscuridad.
Una breve ráfaga de alivio inundo su mente, sólo para ser reemplazado por una desesperanza aún mayor. No había nada más que árboles, hasta donde sus ojos podían ver. Ante él había un bosque muy espeso, y todo lo que tenía encima era el pijama: una camisa negra muy vieja con algunos agujeros y pantalones cortos azules para dormir. No tenía nada para proteger sus pies del terreno forestal.
Intentó buscar un lugar más alto para hacerse una idea de su entorno, pero todo lo que podía ver era lo que los árboles en el bosque.
Sin dirección, vagó ...
Pronto su mente estaba tratando de darle sentido a lo sucedido "¿Fue algún tipo de accidente? ¿Un accidente de avión? ¿Sonambulismo?"
Tales pensamientos se detuvieron rápidamente a medida que su mente siempre volvía al hecho de que todavía llevaba el pijama con el que se fue dormir con esa noche, y sus pies estaban completamente limpios hasta hace un rato ...
"¡Esto es un sueño!" pensó mientras pisaba piedras y ramas durante la última hora y se dio cuenta de que no sentía ningún dolor, ni sus pies se estaban lastimando. Por supuesto, sintió las piedras bajo sus pies, pero, para una persona más de interiores que de aire libre, hacer senderismo descalzo sería sin duda una experiencia muy dolorosa.
Llevaba horas caminando y todavía no estaba cansado, después de permanecer despierto toda la noche, caminando durante quién sabe cuánto tiempo y aun .... aun apenas había sudado a pesar de todo. Lo único que sentía era una extraña sensación de hormigueo de vez en cuando por todo su cuerpo. Pero cuanto más trataba de consolarse a sí mismo, no podía evitar la sensación de que, en el fondo, sabía que estaba en una situación muy grave, y que estaba muy despierto.
Después de un tiempo se dio cuenta de que iba cuesta arriba, "por fin algo diferente, ahora puedo estar seguro de que no voy en círculos".
Su mente estaba trabajando en la evaluación de aquel extraño bosque; ya llevaba un rato que estaba prestando atención, pero no podía oír ningún sonido aparte de las hojas y ramas que bailaban con el eventual viento. No había animales o insectos, nada remotamente en movimiento, o mucho más vivo que un árbol... Darse cuenta sólo agravó la extraña sensación, por lo que se detuvo y simplemente prestó atención a los alrededores.
Conforme iba pasando el tiempo, comenzó a sentirse aún más extraño, la fatiga no se estaba acumulando, tal y como había pensado por primera vez.
"Apenas he sudado hasta el momento, y sólo ha pasado la mitad del día desde el amanecer, sin duda me ha parecido una eternidad, pero el sol hace un momento alcanzó su cenit en el cielo, mi mente me la está jugando ... debo de estar hambriento o algo así, sólo he estado caminando unas pocas horas ... pero todo mi cuerpo se está entumeciendo, y a pesar de todo lo que descanse, no desaparece ... esta maldita colina no está ayudando tampoco. .. ¿cuánto tiempo puede durar esto? podría haber subido al maldito Himalaya dos veces, pero que ni siquiera he llegado a la cima de esta colina abandonada de la mano de Dios"
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No sólo el entumecimiento se apoderaba de su cuerpo, sino también la extraña sensación lo asalto mientras se movía hacia adelante. Su noción del tiempo creía firmemente en lo que podía ver en el cielo. El sol no podía mentir, a pesar de que los sentidos de un mortal sigan su propio curso, sin preocuparse por los problemas de un ser humano. Pero esa noción que lo mantenía cuerdo estaba siendo enormemente desafiada por su mente y sentidos a cada paso que daba; él sabía que algo definitivamente no estaba bien.
Después de un rato, estaba paseando en modo automático, ya no sentía sus pies tocando el suelo. Al principio se detuvo de vez en cuando para frotar sus pies, en busca de signos de mala circulación, pero sus pies tenían un aspecto y color normales, sus dedos estaban perfectamente y con más sangre de lo habitual, probablemente a causa de todo el ejercicio que estaba haciendo.
Más tiempo pasó y el sol estaba todavía en el mismo lugar, sin moverse ... su cuerpo se sentía como si le hubiesen puesto lastre a cada una de sus extremidades y al tronco.
Más adelante, la sensación se intensificó, el entumecimiento impidió sus sentidos; la fuerza que ahora estaba ejerciendo estaba lejos de ser normal, tenía que esforzarse para mover sus extremidades como si estuviese sumergido en el agua, la resistencia de algo que no podía ver. Si cerraba los ojos podía creer fácilmente que estaba inmerso en agua, ya el esfuerzo era similar. Después de un tiempo en ese estado, el agua invisible parecía haberse convertido en lodo, volviéndose aún más densa que antes, cada paso requería más energía para moverse, continuar avanzando era un verdadero dolor. Curiosamente, sólo descanso un poco de vez en cuando.
Con gran esfuerzo caminaba sin parar, puesto que temía que si se paraba no sería capaz de levantarse de nuevo...
De repente y sin que se enterase, el escenario cambió, había llegado por fin a la cima de la colina ... La alegría le hizo recuperar su fuerza. Allí se podía ver un gran árbol solitario, que era similar al árbol en el que se despertó. Tomó refugió en su sombra mientras observaba el entorno.
La somnolencia finalmente pudo con él ...
Pero ahora que por fin había llegado a un lugar diferente no podía permitirse descansar, necesitaba ver lo que le esperaba al otro lado de la colina.
A una docena de pasos desde el árbol estaba el punto más alto de la colina ... Mientras se acercaba, fue asaltado por el miedo, una sensación aterradora de que todo lo que había hecho era en vano.
Justo en el borde de la colina, había un acantilado muy alto. Incluso lejos del borde, era capaz de ver en la distancia pequeños puntos verdes hasta el final del bosque...
La felicidad le embargo una vez más al ver que el maldito bosque tenía un fin. Un buen claro apareció en todas las direcciones después de la frontera del bosque. Sus posibilidades de encontrar un camino mejorarían en gran medida si era capaz de llegar hasta allí. Y encontrar uno facilitaría la tarea de conseguir ayuda, pero primero tenía que llegar allí, y desde donde se encontraba ... parecía una hazaña imposible.
Mirando atrás, de donde había venido, no fue capaz de decir dónde comenzaba la inclinación. ¿Cuánto más tendría que caminar para llegar a una zona más baja? comenzó a preguntarse a sí mismo tratando de reunir la voluntad para seguir adelante.
"Este bosque debe estar muy por encima del nivel del mar, pero ... ¿por qué hace tanto calor si está tan alto? Debería hacer más frío aquí, incluso en el verano" Trató de darle sentido a lo que estaba viendo.
Observando aquella vista, desde lo alto hasta el suelo muy por debajo, pudo ver una muestra de lo que parecía ser una delgada línea de humo blanco procedente del suelo hacia el cielo, que estaba lejos a su izquierda, pero sin duda una buena señal para él.
"¡Gente!" dijo en voz alta sonriendo con sorpresa
Con la esperanza renovada, comenzó desesperadamente a ponerse de nuevo en pie y buscar la manera de bajar de ese acantilado, pero en todas las direcciones que él podía ver, el acantilado simplemente seguía adelante.
Tenía una forma simple: a lo largo de toda su extensión, un enorme muro de piedras escarpadas surgían desde el suelo de la nada. "¡¡Este acantilado no tiene fin!!" se dio cuenta, al tiempo que toda esperanza comenzaba a desvanecerse
Dondequiera que miraba, era una muerte segura ... no había manera de bajar, ya que era una pared de 90 grados. Una vez más la desesperación lo embargaba, "No, no puede ser ... debe haber un camino que me permita bajar, tiene que haberlo" necesitaba ver mejor, acercase al borde, tratando desesperadamente de encontrar una manera de salir de esta situación, su mente estaba resuelta en ese sentido.
Dio otro paso hacia el borde del acantilado, que no estaba demasiado lejos.
Se sentía como si estuviese atrapado en arenas movedizas, la falta de sensibilidad de los pies tocando el suelo junto con el esfuerzo le hizo perder el equilibrio ... se agachó cerca del árbol. Sin inmutarse ante esa sensación, mientras su mente aún estaba enfocada en el objetivo, siguió tratando de avanzar, arrastrándose.
El peso de su cuerpo se estaba poniendo más pesado exponencialmente con cada movimiento hacia el borde del acantilado. Sentía como si el peso del mundo estuviese en su espalda, el entumecimiento comenzó a afectar a su mente, así, incapaz de pensar con claridad, aunque se esforzaba por mantener los ojos abiertos ... casi incapaz de moverse y apenas consciente sin saber cómo de cerca del borde estaba ... se oyó un claro sonido
"¡CRACK!"
Aunque el sonido de rocas agrietándose y rompiéndose podría oírse por debajo, se obligó a avanzar un poco más ...
Y como si hubiese cruzado una puerta, sintió como si todo ese peso se diseminase de su cuerpo hacia su entorno ... y todo fue golpeado por una fuerza invisible, insuperable e inconmensurable.
Sus ojos no se abrirían a pesar de sus esfuerzos, se sintió caer ... y poco después perdió la conciencia.
Oyó algo ... empezó a despertarse ...
La tanto tiempo anhelada sensación de estar en una cama le llegó cuando sintió la almohada y las sábanas que lo cubrían.
"Fue todo un sueño después de todo ...", dijo para sí mismo.
"Kamu ..." - oyó una voz masculina claramente tratando de despertarle. Pero quería dormir, y le era muy difícil despertarse.
"Kamu ... zt .." - oyó de nuevo, como si alguien le estuviese preguntando algo.
"Kamuzyet ..." - escuchó una vez más, ahora sintiendo como si estuviera despertándose.
"¿Kahn-mus?" - Habló sin pensar, tratando de dar sentido a las palabras que le decían, al mismo tiempo que de sacar a su conciencia de la somnolencia. Luchó con la luz hasta que finalmente fue capaz de abrir los ojos por completo.
"¡Khamus!" - Dijo de nuevo la voz, esta vez podía decir por su tono que parecía bastante sorprendido.
Se obligó a sentarse.
Vio la cama y las sábanas, y se dio cuenta de que estaba en el interior de una habitación en una cabaña de madera.
Le estaba hablando un hombre vestido con una armadura completa y ceñida, menos el casco, lo que permitió ver su rostro. El hombre tenía el pelo oscuro y la cara bien afeitada, con un aspecto muy austero, podía verse claramente que pertenecía a un ejército de algún tipo.
"¿Armadura como en la Edad Media? Y con muchos símbolos en ella" El símbolo era león de pie con dos banderas de color púrpura.
"¿Iz et kornoss lo Khamus?" - Dijo el hombre de la armadura, lo único que entendía era la palabra Khamus de nuevo, puesto que ya la había pronunciado en la extraña conversación. Era claramente una lengua que nunca había oído antes.