Isaac se despierta con una sensación de inquietud. La conversación con Ryu de la noche anterior sigue rondando su mente. Trata de concentrarse en su rutina matutina, pero no puede dejar de pensar en la propuesta de unirse a la pandilla.
En la escuela, todo parece normal, pero Isaac se siente observado. Nota que algunos estudiantes susurran y lo miran de reojo. Al final de la clase, Given se le acerca.
Given: Oye, Isaac. Me enteré de que te encontraste con los chicos de la pandilla anoche. ¿Qué vas a hacer?
Isaac: No lo sé, Given. Estoy... estoy confundido.
Given: Mira, solo ten cuidado. Esos tipos pueden ser peligrosos, pero también tienen poder. A veces, estar con ellos puede ofrecer cierta protección.
Isaac asiente, pero la confusión en su mente solo aumenta. Al salir de la escuela, se encuentra con Ryu esperándolo fuera.
Ryu: Hey, Isaac. Pensé que podríamos dar un paseo y hablar un poco más.
Isaac duda, pero finalmente acepta. Caminan juntos por la ciudad, hablando de cosas triviales hasta que Ryu finalmente aborda el tema.
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Ryu: Sé que es una decisión difícil, Isaac. Pero piensa en las oportunidades. No tienes que decidir ahora mismo, pero quiero que sepas que puedes contar con nosotros.
Mientras caminan, pasan por un parque donde ven a unos chicos más jóvenes siendo acosados por un grupo de matones. Sin pensarlo, Ryu se lanza a ayudar, demostrando una valentía que Isaac no había visto antes.
Ryu: ¡Hey! ¡Déjenlos en paz!
Los matones se van, y los chicos agradecen a Ryu. Isaac se queda sorprendido por este lado de Ryu, preguntándose si unirse a la pandilla realmente podría tener aspectos positivos.
Isaac: No sabía que hicieran cosas así.
Ryu: No todo es malo, Isaac. A veces, hacemos lo que los demás no pueden o no quieren hacer. Piensa en ello.
Esa noche, Isaac se encuentra en su habitación, repasando los eventos del día. La confusión sigue presente, pero ahora también hay una pequeña chispa de curiosidad y esperanza.
Isaac (pensando): ¿Y si realmente pudiera hacer una diferencia? ¿Y si unirme a ellos no es solo sobre poder, sino también sobre ayudar?
Justo cuando está a punto de dormirse, su teléfono suena. Es un mensaje de Ryu.
Ryu: "Mañana hay una reunión importante. Si decides venir, te estaremos esperando en el viejo almacén a las 8 p.m."
Isaac mira el mensaje, su corazón latiendo con fuerza. Sabe que tiene que tomar una decisión pronto, una que podría cambiar su vida para siempre.
Isaac (pensando): ¿Qué voy a hacer?
El capítulo termina con Isaac mirando su teléfono, indeciso pero determinado a encontrar una respuesta.