Iba en unas ropas bastante sencillas, de las que no mirarías dos veces.

Pero sus ojos

Allí estaba yo, sintiéndome perdida por la muerte de mi madre, cuando vi aquellos ojos negros como la noche, un vacío oscuro sin fin, me sentí como cuando solía mirar al fondo del pozo y no veía nada, y mi pánico hizo como las piedrecitas que solía tirar a aquí pozo. Desapareció.

Su llegada alarmó a todo el mundo en el culto, algunos intentaron huir, otros, los líderes, intentaron luchar, hablar, culparse mutuamente, pero nada la detuvo, su llegaba trajo muerte a todos aquellos malvados mentirosos.

No sabría explicar como, algunos simplemente cayeron sin vida al suelo, otros gritaron y acabaron con ellos mismos, y muchos otros sufrieron cosas mil veces peores.

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Yo, por mi parte no sentí nada, para cuando dejé de estar perpleja ya había acabado todo, solo quedábamos algunas otras niñas y yo.

(Los niños jóvenes eran llevados por el culto para volverse sacerdotes)

(porcierto la mayoría de la juventud ahí pues son huérfanos, en este caso sólo la prota estaba con su madre, por ello no tienen tanto digamos odio a la bruja las otras, sino más bien confusión)

Entonces ella nos reunió y habló:

"Debéis de estar traumatizadas ahora mismo. Pero no temais, os llevaré a un lugar donde os explicarán lo que os pasará y cuidarán de vosotras"

Y tras esas palabras, nos giró una capa a nuestro alrededor y cuando la capa pasó, nuestro entorno había cambiado.

Ya no estábamos en el campamento, ahora habíamos llegado a una especie de claro en un bosque donde había unas cuantas cabañas, algunos animales y algunos grupos de chicas sobre nuestra edad.

"Os dejaré aquí para que una compañera os haga unas pruebas y según eso os contarán vuestras opciones, lo más seguro esque la mayoría vayáis a un orfanato en la ciudad o un pueblo"